Dos años harán falta para restaurar el paisaje arrasado en el incendio de Terque

Tres días duró el incendio de Terque, que arrasó a su paso 1.200 hectáreas del Valle del Andarax, dejando en el verano de 2019 un paisaje desolador que ahora se pretende recuperar con una actuación de restauración forestal que cubrirá parte de la superficie afectada, en la que se tardarán dos años y en la que se tendrán que emplear hasta 6.700 jornales. La Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible ha licitado por casi 950.000 euros este proyecto de recuperación sobre una superficie de 700 hectáreas de monte.

El incendio forestal se declaró a causa de una tormenta eléctrica en el término municipal de Terque y afectó a 1.200 hectáreas de seis municipios:Huécija, Terque, Bentarique y, con menor virulencia, Instinción, Énix e Illar. La importancia y magnitud no solo se debió a su extensión, sino a la singularidad y valor ecológico de este espacio singular de la sierra almeriense, incluidos en la Red Natura 2000 como Zona Especial de Conservación Sierras de Gádor y Énix.

A través de este proyecto de restauración forestal se acometerán plantaciones de especies arbóreas y arbustivas de gran rusticidad como Pinus halepensis, Quercus coccifera, Quercus ilex, Pistacea lentiscus y especies del género Juniperus. Esta nueva cubierta vegetal servirá tanto para la recuperación del ecosistema afectado como para acentuar y completar la defensa hidrológica de la cuenca, ahora expuesta por la pérdida del efecto protector de la cubierta eliminada por el fuego.

Explican desde la Consejería que se trata de un proyecto de restauración forestal de gran importancia para el buen mantenimiento y mejora de los ecosistemas y terrenos forestales, no solo desde el punto de vista ecológico, sino también para el desarrollo económico y social de las áreas rurales afectadas, mediante la generación de empleo verde. “Este proyecto generará un aumento de los valores naturales como consecuencia directa de las medidas adoptadas para la mejora del medio y, a su vez, facilitará el mantenimiento de la población en el área, produciendo un aumento de empleo valorado en más de 6.700 jornales”, apuntan.

Andalucía cuenta con un extenso patrimonio forestal de incalculable valor natural. El riesgo de incendios forestales se ha convertido en la principal amenaza de los espacios naturales, incendios que generan unas graves pérdidas ecológicas, pero también poniendo en ocasiones en peligro vidas humanas y causando una generalizada alarma social.

La consejera de Agricultura, Carmen Crespo, apunta, además, que el Gobierno de Andalucía es consciente de la necesidad del desarrollo de una política de prevención de incendios forestales entendida como conjunto de medidas cuyo fin principal es evitar que se produzcan dichos incendios y, en el caso de que se produzcan, que la superficie y bienes afectados sea objeto de restauración. La necesaria restauración forestal persigue la recuperación de terrenos forestales que han sufrido algún proceso de degradación mejorando su calidad ambiental, restableciendo sus funcionalidades y favoreciendo su evolución dinámica hacia etapas más estables y maduras ecológicamente.