Las operaciones contra el tráfico de drogas no cesan en la provincia. Almería se ha convertido en punta de lanza de los grupos que trafican a gran escala con todo tipo de sustancias estupefacientes, como demuestra la operación ‘Izabella’ de la Guardia Civil, en la que este lunes han sido detenidos 20 presuntos miembros de uno de estos presuntos entramados criminales, tras la intervención de más de una tonelada de hachís.

Han sido hasta seis los municipios en los que de forma simultánea ha actuado la Benemérita, aunque el mayor peso de las actuaciones se han producido en el término municipal de Roquetas de Mar.

Fuentes de la Guardia Civil han informado a Diario de Almería de que de que en esta intervención han participado unos 250 agentes agentes de la Comandancia de Almería, el OCON Sur (Órgano de Coordinación Contra el Narcotráfico), el CRAIN (Centro Regional de Análisis e Inteligencia contra el Narcotráfico), el GRS (Grupo de Reserva y Seguridad) y el GAR (Grupo de Acción Rápida).

La operación ‘Izabella’ ha estado supervisada por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Roquetas de Mar y se ha centrado en una organización “muy peligrosa” liderada por el clan de los Bistrita, bajo la dirección de ciudadanos de origen rumano, según las citadas fuentes.

Los agentes han efectuado este lunes un total de 13 registros en Almería, Roquetas de Mar, Rioja, Vícar, Adra y Garrucha, que se han saldado con la intervención de más de una tonelada de hachís, siete vehículos, cuatro embarcaciones, armas y abundante documentación.

Además, según han precisado las fuentes consultadas, no se descartan nuevos arrestos en un futuro próximo vinculados a esta red de narcotráfico.