Abril finaliza con una nueva víctima mortal de la pandemia en la provincia de Almería, la 804 desde que comenzó la crisis sanitaria. Este mes la Junta de Andalucía ha notificado 61 fallecidos, 47 menos que en marzo, cuando hubo 108 muertos. Así pues, la mortalidad de la COVID-19 se ha reducido un 56,5 por ciento con respecto al mes anterior.

En términos globales, desde marzo de 2020, el virus tiene una mortalidad de 110,45 fallecidos por cada 100.000 personas y ha provocado la muerte del 1,51% de las personas contagiadas.

Febrero sigue siendo el mes con más muertes, coincidiendo con lo peor de la tercera ola. Esta tabla presenta todos los fallecidos en cada mes desde el inicio de la pandemia.

Mortalidad por COVID-19 en la provincia de Almería.

No obstante, este mes que acaba de terminar se han diagnosticado más casos positivos que el anterior: 4.145 frente a los 3.840 de marzo, es decir, ha habido un incremento de 305 casos.

Esto coincide además con una aceleración del ritmo de vacunación. A lo largo de este mes, según los últimos datos disponibles, se han inyectado más de 100.000 dosis de la vacunas, lo que ha permitido inmunizar a unas 22.000 personas, algunas de ellas con un solo pinchazo tras la llegada del suero de Janssen. A fecha del pasado 2 de abril, la Junta había administrado 120.760 dosis de las vacunas de Pfizer, Moderna y AstraZeneca en la provincia de Almería, con lo que se había conseguido inmunizar tras completar la pauta a 39.716 personas.

Pero la mejoría es evidente sobre todo en las últimas semanas, lo que ha provocado una reducción de la incidencia acumulada. Según los datos facilitados por el Gobierno andaluz, la tasa se sitúa en los 219,9 casos por cada 100.000 habitantes, lo que supone 47,9 puntos menos que la que había el 31 de marzo.