La mudanza de Carmelo

Creará una auditoria externa al principio y fin de su mandato, renovará los estatutos y creará un plan de ordenación de recursos humanos

Carmelo Rodríguez, rector electo de la Universidad de Almería, ayer, en rueda de prensa.
Carmelo Rodríguez, rector electo de la Universidad de Almería, ayer, en rueda de prensa.
Rafael Espino

12 de marzo 2015 - 01:00

La forma de gobernar de la Universidad de Almería puede cambiar. Sobre este principio ha venido armando su campaña el rector electo, Carmelo Rodríguez, quien tras ganar las elecciones del pasado sábado ha puesto las bases de lo que es su nuevo proyecto y ha anunciado sus primeras medidas, que, en esencia, son sus grandes apuestas de campaña. Ya eran públicas, pero no ha querido tardar en hacerlas extensas tras convertirse en el nuevo cabeza visible de la Universidad de Almería. Rodríguez cuenta con un amplio respaldo y lo primero que debe hacer es agradecerlo: "El apoyo que he recibido es muy importante y me hace sentir muy optimista para que estos proyectos lleguen a buen puerto". Ayer, en rueda de prensa, detalló los primeros cambios. Tiene especial importancia elplan de reorganización de los recursos humanos y de reestructuración de Servicios que incluya una normalización de los procesos de promoción y provisión.

Se trata de realizar un plan de gestión basado en el talento, la equidad y la transparencia que aborde la descripción de competencias de los puestos de trabajo y una daptación de los procesos.

Dentro de los compromisos adquiridos con el PAS destaca la puesta en marcha de un sistema de promoción horizontal universal, movilidad entre escalas y flexibilidad remunerada. Para Carmelo hay que evitar la externalización de las funciones administrativas y, como consecuencia, se negociará con los órganos de representación las funciones ahora externalizadas que puedan ser desempeñadas por la plantilla disponible de la UAL.

Entre otras medidas para el PAS se encuentra en plan de conciliación laboral, negociar un acuerdo de derechos y garantías sindicales similar al del resto de universidades andaluzas, evitar cargos intermedios con responsabilidades técnicas y confiar en el PAS para funciones de asesoramiento y toma de decisiones e incluso redefinir la política de administración electrónica. Así como eliminar las prejubilaciones del Plan de Acción Social.

Con respecto al Personal de Administración (PDI), Carmelo entiende que es necesario reconocer el compromiso diario y la dedicación profesional de los profesores e investigadores que trabajan en la UAL. En su candidatura refleja que hay que establecer un plan de organización, de formación y de incentivos para el PDI. En particular, debe reformularse la dedicación docente del profesorado. Tiene en mente estudiar la posibilidad del pago de quinquenios y sexenios para los PDI Laborales acreditados a la figura de Titular de Universidad en conjugación con el premio de funcionarización o Homogeneizar los criterios de asignación de docencia y espacios entre profesores laborales fijos y profesores titulares.

Con respecto a los Estudiantes, Carmelo Rodríguez ha venido asegurando que le gustaría que los estudiantes se sintieran "orgullosos de estudiar en la Universidad de Almería, entre otras cuestiones, por su excelencia académica socialmente reconocida". Por eso, en su candidatura exponía una reforma de los planes de estudio y adecuar el mapa de masteres para que sean más competitivos y próximos a la realidad laboral; incrementar las prácticas en empresas y apoyar a los emprendedores.

Rodríguez también propuso mantenerlos informados y atender sus necesidades mediante una Comisión de quejas en los Centros y la creación de la figura del Adjunto para estudiantes del Defensor Universitario, bajar las tasas de los servicios universitarios, incrementar y adelantar las becas propias, examen de B1 interno gratis y formación en idiomas certificable a coste mínimo, mejorar el equipamiento de las aulas, aumentar las salas de estudio y negociar la mejora de las condiciones del transporte universitario.

En definitiva, una serie de cambios que se establecieron en 57 propuestas y que incluso incluyen una reforma de los propios estatutos de la Universidad.

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