El municipio rinde homenaje a los vecinos que trabajaron y moldearon el esparto

El alcalde de Carboneras, Salvador Hernández y el escultor Roberto Manzano, junto a varios concejales del equipo de gobierno y numerosos vecinos, inauguraron hace unos días el Monumento al Esparto, una escultura de tres metros de alto que rinde homenaje a los hombres y mujeres que durante muchos años se dejaron la piel en los montes del municipio o ejercieron el oficio artesanal del espartero.

La escultura de mármol blanco de Macael de 12.000 kilos, consta de dos bloques de tres metros de alto por dos y medio de largo y está inspirada en las manos de los artesanos carboneros tejiendo pleita. El monumento ha sido realizado por el escultor madrileño Roberto Manzano y ha quedado expuesto en la plaza ubicada junto a la parada de autobuses de la Avenida de Almería, remodelada completamente para albergar este emotivo monumento.

La industria del esparto fue por más de cien años, fuente de ingresos y sustento de muchos habitantes de Carboneras. Las mujeres y los hombres recolectaban el esparto en los montes y lo acumulaban en fardos que posteriormente almacenaban en el "almacén del esparto", ubicado junto a la playa de la Puntica de la localidad. Dos veces por semana, llegaban a las playas del municipio levantino, barcos a vapor para transportar vía Garrucha o Águilas, el producto al Reino Unido y a otros países europeos.

Asimismo, surgió entre muchos de los habitantes de la localidad el oficio del espartero, personas que se autoabastecían de la planta una vez recolectada, con la que elaboraban diferentes productos que iban desde calzados, persianas, sogas, fundas, hasta cestos y espuertas.

El escultor madrileño Roberto Manzano ha querido reflejar en la escultura la posición típica que adopta el espartero cuando está tejiendo el esparto.