La nueva Ley de Cooperativas verá la luz antes de fin de año

El funcionamiento y la estructura jurídica de las sociedades cooperativas debe tener un transcurrir lo más paralelo posible a las sociedades mercantiles. Así se puso de manifiesto ayer en el seminario 'Aspectos Mercantiles y Fiscales de interés de las Sociedades Cooperativas', organizado por el despacho de abogados Garrigues, que se desarrolló ayer en el Hotel NH de la capital almeriense.

El acto de inauguración contó con la presencia del consejero de Innovación, Ciencia y Empresa, Martín Soler, que anunció que la Junta de Andalucía ya ha abordado la necesaria reforma del régimen de las sociedades cooperativas, cuyas primeras modificaciones empezarán a ver la luz durante el último trimestre de 2009.

Ante un aforo de más de cuarenta personas, Soler abogó por la necesidad de reformas para mejorar la posición de liderazgo de "muchas cooperativas andaluzas". Una responsabilidad, la de las modificaciones, que asumió para la Junta de Andalucía, para obtener como resultado una sociedades cooperativas más flexibles, modernas, ágiles y, sobre todo, más competitivas.

La nueva Ley de Sociedades Cooperativas vendrá a sustituir a la actual, que data de 1999. El consejero desgranó las principales novedades en las que está trabajando ya su departamento para fortalecer a este modelo societario ante el mercado, cada vez más globalizado y que en España cuenta con 19.690 sociedades cooperativas, de las que más de 5.130 operan en Andalucía, un 26% del total nacional.

Las cooperativas andaluzas generan 58.100 puestos de trabajo, más de un 18% de los empleos que registra el sector a escala nacional. Almería va a contracorriente en cuanto a las actividades que realizan las sociedades cooperativas en Andalucía, la mayoría de ellas, dedicadas a los servicios (50%), mientras que las agrícolas suponen el 9%, frente al 15% que estas tienen en Almería.

Martín Soler destacó algunas de las principales novedades que servirán para modernizar el cooperativismo agrario: transmisión de las participaciones de los socios en caso de baja; establecimiento del voto plural ponderado en las cooperativas agrarias; creación del grupo empresarial cooperativo; eliminación de los límites para operar con terceros; reducción del número de socios, de tres a dos miembros; reducir de dos meses a uno el plazo de inscripción en el Registro de Cooperativas, una medida que dará rapidez a la creación de nuevas sociedades; agilizar la vida de las cooperativas con menos reuniones del Consejo Rector, pasando de los actuales encuentros mensuales a realizar uno al año; disminución de la dotación legal al Fondo de Reserva Obligatorio, recortando en cinco puntos el porcentaje de los excedentes para el capital social, que será "en primer lugar de un 15%, hasta llegar a la mitad del capital social, y se quedará en un 10%", mientras que el porcentaje destinado a la Administración, en caso de disolución, pasará "de un 100% a un 25%".

El consejero cerró la inauguración animando al mundo cooperativo agrícola a emprender "una revolución", incorporando las nuevas tecnologías a los procesos de producción y gestión diarios e innovando, "cambiar la mentalidad, con nuevas ideas", para no quedarse sólo en la mera investigación.

El seminario contó también con la participación de José Ramón Tenor, asociado del Departamento Mercantil de Garrigues; Carlos Vargas, profesor titular de Derecho Mercantil de la UAL; Emigdio del Toro, socio del Departamento Fiscal de Garrigues; y Ricardo Domínguez, director general de Industrias y Calidad Agroalimentaria de la Consejería de Agricultura.