Los peques ahorran con huchas de diseño propio

Como cada jueves en los últimos dos meses, la Biblioteca Francisco Villaespesa acoge un nuevo taller de verano infantil, en este caso el último. En esta ocasión los pequeños tendrán que demostrar su destreza decorando cuencos de cristal con sus dibujos preferidos.

No eran ni las 18:30 horas y la sala infantil estaba repleta de niños nerviosos a la espera de que se inicie la actividad. En el caso de los más pequeños, sus padres les acompañan. La actividad se dividió en dos partes: por un lado, los pequeños contestaron a una encuesta valorando lo que les habían parecido los talleres y escogiendo su preferido de una manera original como es dibujando dicho taller; por el otro, se desarrolló el taller de decoración de cristal programado para el día.

Charo Chía, coordinadora de las actividades, comenta que al ser el primer año que este taller se lleva a cabo "lo estamos haciendo de una manera básica". El resto de talleres que ya se habían llevado a cabo en otras ediciones se repitieron este año con algo más de dificultad. Los materiales para realizar la actividad eran sencillos: cuencos de cristal y botes de cocina con cierre herméticos junto con servilletas de papel decorativas que los niños recortaron y pegaron con cola y agua, aplicando después un barniz para cristal. La idea era fabricar un "botecito para que ellos puedan empezar a ahorrar o guardar sus objetos de colección", comenta Chía.

Al preguntarle por el taller que más ha gustado a los pequeños, Chía comenta que "por lo que he visto, el taller de camisetas y el de cometas han sido sus preferidos". Señala que suelen gustarles las actividades "donde pueden dar rienda suelta a su imaginación".

Asimismo, sostiene que la valoración de todas las actividades ha sido "positivísima", sobre todo porque "este año hemos contado con un espacio más pequeño por razones coyunturales que harán que el próximo año contemos con un espacio mucho más amplio". También agradeció a los padres "su apoyo y colaboración".