Sin poder donar sangre por tener una discapacidad leve
ASPAPROS denuncia que no existen motivos objetivos para que un médico no se lo permitiese
Lucía es una joven de 24 años con una discapacidad de grado leve. Uno de sus sueños era donar sangre pero no pudo hacerlo debido al criterio médico de un facultativo del centro de salud de Los Molinos. Al menos así lo asegura la Asociación de Padres y Protectores de Discapacitados Psíquicos de Almería (ASPAPROS), que en declaraciones a Diario de Almería aclara que los hechos tuvieron lugar el miércoles por la tarde cuando la afectada, que oculta su nombre con un pseudónimo, acudió junto a una monitora y tres compañeras a dicho centro, en el que se realizaba una colecta de sangre.
Cuando intentó donar su sangre, un médico le informó que debido a su discapacidad no podía hacerlo, porque podría no ser consciente de los riesgos que suponía para su salud o a la hora de responder con veracidad si cumplía los requisitos para este fin. Desde ASPAPROS apuntan que junto a Lucía había otras tres chicas que también querían donar pero que por distintos motivos, que en el colectivo entienden como más objetivos, no pudieron hacerlo. Una de ellas tiene síndrome de Down, otra sufrió un temor y la tercera sufrió un daño cerebral, lo que sí podría suponer un peligro para ellas en caso de donar sangre, pero desde ASPAPROS mantiene que Lucía sólo tiene un ligero retraso cognitivo.
"Se desenvuelve perfectamente aunque hay cosas en las que necesita que la apoyen", dicen desde el colectivo de Lucía, recordando que con ella iba una monitora que podía haberla ayudado. "Creemos que a través de estos apoyos, pueden hacer de todo, pero les tienen que dar la oportunidad", concluyen.
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