El polivalente se prepara para su apertura como centro de negocios

Abrió sus puertas los escasos diez días de los Juegos Mediterráneos y a los 12 millones de euros que costó el edificio polivalente de El Toyo no se le ha sacado mayor rentabilidad que esta. Ahora, el Ayuntamiento pretende cambiar el sino del polémico inmueble y destinarlo, a través de una concesión de la que lo más probable es que se haga cargo Asempal, en un centro neurálgico de negocios.

Los concejales del PP y Gial miembros de la Junta de Gobierno aprobaron ayer el pliego de condiciones que regirá la adjudicación, mediante concurso público, de la explotación del polivalente. Los cálculos municipales sitúan "entre tres y cuatro meses" la resolución del concurso, en el que se perfila como caballo ganador Asempal hasta el punto de que no sería en exceso arriesgado darlo por hecho al tratarse de un concesión demanial. Es la Patronal la que propuso la idea de convertir el polivalente en un centro de negocios y quien concurra deberá aplicar el proyecto que, elaborado por Asempal, es quien mejor lo conoce. No es la primera vez que el Ayuntamiento opta por las concesiones demaniales y, hasta ahora, el gato al agua siempre se lo ha llevado aquel concursante que presentó la idea original.

La Patronal deberá aceptar el canon anual que ha acordado el Consistorio capitalino, que le indulta de su pago durante los primeros cinco años, una consideración que el concejal de Hacienda, Pablo Venzal, justificó ayer por la situación económica y por la inversión de 3,6 millones que el adjudicatario tendrá que inyectar en las dependencias para su adaptación a los usos futuros. El sexto año el canon establecido es de 3.300 euros, cantidad que deberán abonar hasta agotar la mitad del tiempo de concesión - 40 años- y a partir de ahí el recibo ascenderá a 49.800 euros anuales, montante al que se le ha de aplicar las futuras revisiones del IPC.

El responsable de Hacienda explicó que el canon inicialmente propuesto por Asempal, que aspiraba a una cantidad "simbólica", fue rechazo por el Ayuntamiento por "otra aportación con una sensible mejora para los intereses de la ciudad".

No todos lo grupos políticos estarán de acuerdo. Izquierda Unida ha criticado desde el principio la entrega de un edificio público que costó 12 millones de euros a Asempal, defendiendo su apertura como centro de convenciones. Venzal hizo una referencia a esta propuesta, recordando el dictamen de un estudio de viabilidad encargado por el área de Urbanismo en el que se desaconsejaba dicho uso.