El profesor que fue condenado por abusos dejó el SEK hace diez años

El colegio SEK Alborán despidió hace casi diez años, dentro de una reorganización académica, al profesor que fue condenado a dos años y medio de prisión por abusar de una alumna de ocho años en su domicilio, pena dictada por la Audiencia Provincial de Almería y ratificada posteriormente por el Tribunal Supremo (TS).

De esta forma, desde este centro docente se ha trasladado a Diario de Almería que el profesor fue despedido el 30 de junio de 2007, por motivos únicamente relacionados con el funcionamiento del colegio, efectuándose la denuncia por estos hechos en abril de 2013, cuando ya llevaba seis años despedido.

Asimismo, desde el SEK Alborán se ha recordado que los citados abusos se produjeron en el ámbito de la esfera privada, "no tuvieron lugar ni en el centro escolar ni en horario lectivo. Como relata la sentencia, se produjeron en un domicilio particular".

Además, el colegio informa de que jamás ha tenido conocimiento de los hechos juzgados ni de la denuncia, ya sea a través de los tribunales o de las partes implicadas, hasta que la ratificación del TS fue publicada en este periódico.

Los hechos tuvieron lugar durante el curso escolar 2003/2004, cuando la víctima era alumna del profesor, que le impartía clases de "diversas disciplinas". "A lo largo del curso, la menor fue incrementando un sentimiento de cariño hacia el procesado, lo que le llevaba a pedir a sus padres en varias ocasiones que le permitieran acudir al domicilio de éste, accediendo a ello los progenitores al no ver inconveniente alguno y pensar que podía servir de apoyo para sus estudios", añadía el fallo.

Así, la menor, a lo largo del curso, estuvo pernoctando "al menos en cinco ocasiones en la morada del procesado, ocasiones en las que éste... estuvo durmiendo en su dormitorio con la menor y, hallándose ambos acostados... le aplicaba tocamientos". Años después, en abril de 2013, la menor contó a sus padres lo ocurrido. A raíz de ello, una vez examinada por psicólogas, se le detectaron "sentimientos de desaprobación".