"No hay pruebas de que Rangel estuviera en el lugar del enterramiento de Rosa Galera"

La Guardia Civil dice en el juicio que el cuerpo "sí" pudo ser enterrado por una sola persona

Familiares y amigos de Rosa Galera a la salida del juicio que se celebra en la Audiencia Provincial.
María José Uroz

28 de junio 2013 - 01:00

Los testimonios de los guardias civiles que prestaron ayer declaración en la tercera sesión del juicio por el crimen de Rosa Galera benefician a la defensa de Francisco Javier Rangel, el acusado de encubrir el homicidio. Conforme van transcurriendo las sesiones y a tenor de las manifestaciones de los agentes que participaron en la investigación, "no hay pruebas de que Rangel estuviera en el lugar del crimen, puesto que no se encontraron restos biológicos de él en la rambla donde estaba enterrado el cadáver, ni en la pala que se localizó a pocos metros", como indicó uno de los agentes.

La escasa profundidad en la que estaba enterrada la víctima, apenas seis centímetros, evidencia según otro de los investigadores que "una persona sola sí pudo enterrar el cuerpo sin ayuda de nadie", al tiempo que asegura que el surco paralelo de dos ruedas en el camino de tierra de la rambla de Tabernas evidencia que "en ese lugar sólo hubo un coche".

Pero no todos los testimonios benefician a la defensa del presunto encubridor del crimen de la vecina de Fines, puesto que según la declaración de varios agentes de la Guardia Civil "es muy difícil describir con detalles exactos el lugar donde se ocultó a la fallecida si no hubiera estado allí", es más asegura que "tiene que ser de suerte encontrar un lugar así, que está en una zona muy escondida y con muchos recodos".

El capitán de la Guardia Civil de la Central Operativa de Madrid que se hizo cargo de la investigación prestó declaración por videoconferencia y aseguró ante la sala y el jurado popular, que deberá emitir veredicto sobre la culpabilidad o no culpabilidad de los dos acusados (uno por homicidio y otro por encubrimiento), que él mismo fue quien tomó manifestación al Óscar Perales cuando de forma voluntaria indicó que sabía dónde estaba Rosa y que quería contar lo que había ocurrido. Fue cuando se encontraba detenido y ya habían pasado dos días que estaba privado de libertad en las dependencias de la Guardia Civil.

El juicio, que continuará hasta el próximo día 3 de julio en la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Almería, se inició centrándose mayormente en el homicida pero en las últimas sesiones la implicación o no de Francisco Javier Rangel en los hechos ha acaparado protagonismo.

Hoy está previsto que declaren testigos propuestos tanto por las acusaciones particulares como por la defensa y el Ministerio Público, que dejarán constancia de lo que vieron el día en el que ocurrieron los hechos y los días posteriores cuando todo el pueblo se echó a la calle en busca de Rosa Galera, cuya desaparición denunció su padre.

Los peritos forenses explicarán sus informes de autopsia el lunes, según lo previsto.

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