El relevo de un partido unido con ganas de crecer

José Luis Aguilar entrega el testigo a Javier Aureliano García al frente de la Secretaría General con la encomienda de mantener al PP cohesionado

Algunos sin cartulinas, otros sin levantar el brazo o con la papeleta boca abajo,  pero la mayoría dio su 'sí'
Algunos sin cartulinas, otros sin levantar el brazo o con la papeleta boca abajo, pero la mayoría dio su 'sí'
María Victoria Revilla / Almería

23 de noviembre 2008 - 01:00

Calma. Sin sorpresas y sin reproches. Todo como se esperaba. El 11º Congreso Provincial del Partido Popular nada tuvo que ver con su predecesor, pero la sombra de la división estuvo presente en la memoria como una experiencia de la que es necesario aprender. Es el relevo que en el Palacio de Congresos de Aguadulce entregó José Luis Aguilar al nuevo secretario general del PP. Javier Aureliano García recibió de su abrazo un partido ahora cohesionado y la encomienda de "trabajar" para reconquistar la Diputación.

Visiblemente emocionado, Aguilar ofreció su último discurso como secretario general, plagado, como siempre, de experiencias atesoradas durante más de 20 años. No quiso decir adiós, pero sí despedirse haciendo memoria de la gestión de este mandato agotado donde la "recomposición del partido" ha sido el principal mérito conseguido "con muchos kilómetros recorridos y con muchas personas a las que escuchar", describió.

No quiso obviar Aguilar los "tiempos difíciles" de "tanta crueldad y tanto daño". No le tembló la voz cuando expresó que "si José Añez me pidiera sangre, yo se la daría, porque no le tengo ningún odio; pero debo dejar constancia de la mella que ha dejado en el partido que tanto le ha dado a este hombre", razón por la cual no faltaron los elogios por la desarrollada por Gabriel Amat como presidente provincial.

El reto que tiene ante sí García se lo recordó Aguilar prácticamente nada más comenzar su discurso, recuperar la Diputación provincial, pues "es una pena -dijo- que una institución tan señera y fundamental para la vertebración de la provincia esté desde hace cinco años en la situación en la que se encuentra". Le recomendó al nuevo secretario general no cambiar su personalidad. Lo definió como "buena gente, de "sonrisa siempre abierta", "leal" y con "gran potencial para dar cariño y escuchar a las personas".

García asumió, ante el alcalde de Almería visiblemente emocionado y ante representantes de las 150 asociaciones invitadas, tanto el reto como los consejos de Aguilar. Sin perder la sonrisa en ningún momento , hizo un "llamamiento y una invitación a los que sienten populares de toda la vida, populares de corazón, que no se dejen llevar por un malentendido concepto del personalismo. Lo que verdaderamente nos une son los valores y las ideas, los liderazgos personales van pasando", remachó para enviar a la platea un mensaje de cohesión.

El nuevo secretario adquirió el compromiso por su parte de revalidar la presencia de los populares en los ayuntamientos que ya gobierna esta fuerza política, "gobernar en los que ahora está en la oposición y recuperar la Diputación". Para ello, ofrecerá "apoyo técnico" a los concejales y diputados . "Un partido -añadió- tiene que estar vivo, haya o no elecciones; estar siempre trabajando porque los ciudadanos no perdonan que pidamos el voto cuando quedan días para las elecciones."

Amat rubricó con su discurso los propósitos del Partido Popular en el ámbito provincial, regional y estatal. "Nos dejaremos la piel en el camino, trabajando por nuestra provincia, por aquellas zonas que no reciben las obligaciones y los compromisos, que no reciben de la Junta ni del Gobierno central lo que tienen obligación de dar". En cifras, más de 1.000 millones de euros en los últimos años, un dato que el PP asegura que "cambiará". Es la hora, para ellos, de la renovación.

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