Los requisitos para alcanzar un gobierno abierto y transparente
El director del Observatorio de Buena Gobernanza los desveló ayer en su conferencia
"España se enfrenta a graves problemas de desafección ciudadana y de corrupción y como consecuencia existe una deslegitimación del sistema que requiere respuestas", así empezó su ponencia el director del Observatorio de Buena Gobernanza, ayer en la UAL, donde habló de conducta pública y transparencia.
Manuel Villoria Mendieta, doctor en Ciencias Políticas y Sociología ofreció la conferencia "Ética y Conducta Pública, Liderazgo y Transparencia", en la que explicó los primeros pasos de cara a conseguir una transparencia y gobierno abierto, destacando que lo esencial "es tener una actitud positiva y querer cambiar. Villoria insistió en que "empiezan a generarse algunas leyes estatales y autonómicas que ayudan a la transparencia pero las instituciones tienen que definir proyectos para que todo funcione, creando los órganos adecuados para gestionar estos procedimientos, garantizando su autonomía, independencia y protección".
Según Villoria "las instituciones son la clave para crear un país desarrollado y luchar contra la corrupción". Sólo de esta manera se podrá acabar con la desconfianza institucional, generada por una parte, por una crisis económica que ha disparado el desempleo y los recortes sociales, generando más desigualdad, y por otra, y más importante aún, una sensación de que el sistema no responde equitativamente y con cercanía a las demandas de la gente, en este momento especialmente difícil.
Así lo indica el Eurobarómetro de 2013, en el que el 77% de los españoles cree que la corrupción es parte de la cultura de los negocios en el país (la media europea es del 67%), el 84% considera que el soborno y las conexiones son la forma más sencilla de obtener servicios públicos (media europea 73%), el 67% que la única forma de tener éxito en los negocios son las conexiones políticas (media europea 59%).
Las respuestas a esta situación, según Villoria "crear instituciones previsibles, eficientes, legítimas y equitativas". Gobiernos que rindan cuentas, que sean imparciales y transparentes, cuyos objetivos se dirijan a conseguir el desarrollo sostenible, la calidad de vida y la garantía democrática, y hagan frente a los retos de la desigualdad, la pobreza, la corrupción, el clientelismo y la inseguridad. "Una tarea nada fácil pero tampoco imposible", sentenció.
Manuel Villoria es doctor en Ciencias Políticas y Sociología y director del Observatorio de Buena Gobernanza. Ha publicado varios libros sobre esta temática como 'El Marco de Integridad Institucional en España. Situación actual y Recomendaciones' o 'La transformación del Estado para el desarrollo en Iberoamérica. Aportes para la discusión'.
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