El 'señor' de los pájaros del Valle del Almanzora

Era la Feria de Albox, la del 25 aniversario de la proclamación de Alcaldesa Honoraria Perpetua y Coronación Pontificia de la Virgen del Saliente de la Villa de Albox. Y allí el canto timbrado de aves tiraba del paseante al Mercado de Abastos. Allí, en uno de sus pasillos, centenares de jaulas con inquilinos de diversa índole y condición se exhibían a la mirada y el comentario de los visitantes que, como en todo, son discrepantes o coincidentes según el gusto y entendimiento de cada cual.

Francisco López Maldonado se dedica a la canaricultura y el silvestrismo desde que era un crío, "mi afición comenzó siendo yo muy joven y esto es un venenillo que no para, se le presta mucho tiempo a esto. Soy secretario, tesorero, presidente, de todo, llevo los papeles de la Asociación Ornitológica del Valle del Almanzora y aquí también hay representación de la Asociación de Canaricultura y Ornitología Indalo de Albox ".

La afición al silvestrismo es notable en Andalucía, una actividad de entretenimiento que requiere vocación "porque", explica Francisco López, "no está permitido comerciar con el pájaro silvestre; sí lo puedes capturar y cuidar si tienes acreditación para ello. Además, entre nosotros mismos, los verdaderos aficionados no permitimos la compra venta de los silvestres de la zona: jilguero, pardillo y verderón, que en otros lugares algunos tienen distintos nombres".

Algo que sí señala Francisco Maldonado es que los ecologistas protestan por la captura del jilguero, de los pájaros silvestres en general, sin saber a ciencia cierta "de qué va esta afición. Le damos a los pájaros un trato exquisito y, además, si se prohibiera lo único que se conseguría es que aparezca el mercado furtivo, sin control de ninguna clase". Al hilo de la conversación sale a relucir la asamblea extraordinaria convocada por la Federación Española de Caza celebrada el pasado mes de julio en Archidona, en relación al silvestrismo, especialmente el dictado de la Resolución de capturas de este año por parte de la Junta de Andalucía que, al igual que en la temporada anterior, contiene una importante reducción del número de ejemplares permitidos para la práctica del silvestrismo así como la prohibición del arbolillo.

Según la FAC, "el silvestrismo es una práctica ancestral mediante la que se capturan con vida y sin daño a ejemplares de las especies jilguero, pardillo y verderón para, posteriormente, adiestrarlos en el canto. Es una práctica totalmente inocua para el medio ambiente y no tiene ningún perjuicio para el entorno natural. A día de hoy no hay ni un solo estudio que asegure que el silvestrismo pueda ser perjudicial y que justifique su desaparición".

Francisco López Maldonado suscribe lo anterior al ciento por ciento, mientras atiende cuestiones relacionadas con la organización de la muestra "que se hace solamente como una actividad más de las Fiestas de Albox. Sí hay concurso pero sólo se premia la belleza del pájaro. Las verdaderas competiciones, los concursos, se organizan en ámbito provincial, nacional e internacional y ahí sí, ahí ya se mira el canto, la postura, el color, lo exótico, en fin, lo que es un concurso ornitológico".

La ornitología, el estudio de las aves, su desarrollo o evolución, como es el caso de los canarios que merecen un tratado extenso acerca de una especie que por su bello aspecto y por su canto privilegiado, los primeros conquistadores de Canarias, al comienzo del siglo XV, llevaron a Europa los primeros ejemplares, ya en el primer decenio del siglo XV. Al parecer, el primer rey que poseyó canarios fue Enrique III de Castilla. Este apartado pertenece ya a otra historia que será contada en estas páginas.