Los singles, un rentable negocio para las empresas de ocio y turismo

Las empresas turísticas y de ocio se adaptan a los nuevos tiempos y ofrecen un amplio abanico de posibilidades para las vacaciones. Lo último son los viajes para singles, una moda en auge y un rentable negocio para hoteles y agencias de viajes.

En muchas ocasiones, la independencia que otorga la vida de soltero hace que los singles aprovechen su tiempo libre para viajar y conocer lugares nuevos. Según datos proporcionados por el Instituto Nacional de Estadística este colectivo suele viajar un 39% más que la media de la población y en cuanto a los destinos prefieren innovar decantándose por lugares exóticos y de aventura.

La tendencia de los 'sin pareja' a contratar viajes en compañía de otros singles hace que las empresas turísticas ofrezcan grandes descuentos a estos grupos. Así, los 'impares' se convierten en una importante fuente de ingresos para éstas.

Internet es otra de las alternativas más recurridas a la hora de organizar viajes para solteros. Los propios singles publican anuncios buscando gente para compartir actividades y planes para las vacaciones. Además de ahorrar dinero en la factura de hoteles, conocen gente con la que disfrutar del tiempo de ocio. A través de encuestas realizadas por las propias agencias de viajes se han podido observar algunos de los gustos preferidos por los solteros para disfrutar de las vacaciones. Suelen viajar por su cuenta, pero junto a un grupo de personas que al igual que ellos, contratan viajes sin acompañantes. Además van con la certeza de conocer gente nueva con la que compartir las vacaciones.

Dentro de los lugares preferidos, la provincia almeriense se convierte en uno de los destinos vacacionales más elegidos por los singles. La oferta es variada, se puede optar desde unas vacaciones con niños en la costa de Aguadulce hasta unas jornadas en la naturaleza para solteros en un cortijo de Lucainena de las Torres.

Sin duda, la tendencia a viajar solo, pero acompañado, se extiende a una velocidad imparable y es cada vez más frecuente en nuestro país. Una manera económica de disfrutar de las vacaciones y conocer gente con la que establecer una futura amistad y quién sabe si algo más.