El sonido de un arpa crea un mundo musical envolvente

Rosa Díaz mostró su talento y la soprano María José Alcázar enamoró con su voz al público La Sinfonía nº 40 de Mozart cobró protagonismo en la parte final del concierto

Fue un concierto que gustó al público.
Fran Murcia Vélez Blanco

27 de julio 2016 - 01:00

El sonido de la Orquesta Ciudad de Almería, siempre inconfundible, con ese mágico sonido donde la dulzura de sus instrumentos envolvían en una atmósfera perfectamente creada por su director Michael Thomas, cautivó al público velezano.

Este concierto comenzó con el arpa como protagonista y acompañado de forma magistral por los instrumentos de cuerda de la OCAL. La Orquesta tuvo el privilegio de contar con el arpa de Rosa Díaz, que es solista en la Orquesta Filarmónica de Nuevo Brandenburgo desde noviembre de 2013. Cuenta con una trayectoria con grandes logros: fue academista de Arpa en la Orquesta de la Ópera Estatal de Berlín y ha tocado bajo la dirección de Daniel Barenboim, Sir Simon Rattle, Kirill Petrenko, Daniel Harding…

La artista acariciaba las cuerdas del arpa con una delicadeza sublime y ofreció un nivel que maravilló a los asistentes que pudieron disfrutar del concierto de la OCAL desde casi el inicio del Festival. En años anteriores, esta cita siempre se conmemoraba en los días finales de esta semana cultural.

La joven es requerida para conciertos de solista con orquesta y recitales de arpa, y la Iglesia Parroquial de Santiago tuvo el privilegio de ver uno de sus solos con este instrumento. Después, le tocó el turno a la soprano María José Alcázar que pudo conducir con su voz a toda la orquesta almeriense.

La soprano convenció a los asistentes al concierto que ofrecieron un fuerte aplauso tras cada interpretación de la joven. La artista ha trabajado bajo las órdenes de José Luis Temes, Juan de Udaeta, Enrique Mazzola, Christopher Hogwood y Daniel Barenboim, entre otros. Recientemente ha cantado el Carmina Burana de Carl Orff en la producción de La Fura del Baus junto a la OCAL en el Auditorio Maestro Padilla de la capital.

El público aplaudió durante minutos a la soprano que tuvo que aparecer varias veces sobre el escenario para mostrar su agradecimiento por la ovación. Las cuatro partes que interpretaron de La Sinfonía nº 40 de Mozart sirvieron para mostrar el talento que poseen los músicos de la OCAL.

Las piezas que se interpretaron fueron: Concierto para Arpa y Orquesta en Si b M OP 4 nº6, de Haendel; Semele. Aria: Oh Sleep, de Haendel; Medea. Aria: Solo un pianto, de L. Cherubini; La Clemenza di Tito. Aria: Deh per questo istante, de W. A. Mozart; La Favorita. Aria: O mio Fernando, de G. Donizetti; y Sinfonía nº 40 en Sol m. KV 550 (Molto allegro, Andante, Menuetto, Allegro), de Mozart.

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