El tren llegará al puerto ... de Carboneras

El soterramiento del ferrocarril, o mejor dicho la falta del mismo después del mazazo recibido en forma de Presupuestos Generales del Estado, puede transformar de una manera radical el mapa provincial del transporte en la provincia, al menos en lo que a la supuesta capitalidad del mismo se refiere. Según ha podido conocer Diario de Almería, una de las opciones que se barajan como posibilidades más que factibles, es trasladar la mayor parte de la actividad comercial de Almería, al puerto de Carboneras. Desde la localidad del Levante, sería más fácil y sobre todo más económico, construir un acceso a la futura ruta del AVE y también a la proyectada (y por el momento nunca concretada) Zona de Actividades Logísticas que se proyecta en la localidad de Níjar.

Sin duda, el más perjudicado por la ausencia del soterramiento ferroviario será el Puerto de Almería. Después de la declaración del Miércoles Santo de que la llegada del tren a sus instalaciones "no es prioritaria" las instalaciones portuarias ven más que comprometido su futuro a medio y largo plazo. Sencillamente no pueden plantearse pasar otra década sin aprovechar sus aún inexplotadas potencialidades. Necesita una conexión con el ferrocarril de manera urgente. Son cientos los millones que se han perdido durante estos últimos años por no disponer de ese enlace.

La intención del Ayuntamiento de la capital parece ser la de sacar con urgencia las vías de la ciudad y recuperar la idea de la estación en el barrio de El Puche. Eso supondría, en primer lugar, un esfuerzo más que considerable por convencer a los responsables del Ministerio de Fomento en la reunión que en los próximos días mantendrán con los representantes del Consistorio. Al menos hasta el momento, la postura oficial es la de no mover las estaciones del centro. Algo así ha pasado en Granada.

De trasladarse la estación, las posibilidades de tener una conexión ferroviaria desde el muelle de Levante hasta las afueras de la ciudad, serían prácticamente nulas. El trazado en superficie, como sucede, por ejemplo en Málaga, aún posible ya que la Autoridad Portuaria tiene la concesión del antiguo trazado de las vías, no parece defendible ya que sería, en resumen, quitar unas vías para poner otras. Esta solución sólo pasaría si se deja la estación en el lugar en la que se encuentra en la actualidad.

Es entonces cuando entra a jugar la baza de Carboneras. En este caso, las inversiones efectuadas en sus instalaciones permiten ofrecer una superficie adecuada a la espera de futuras ampliaciones que, en cualquiera de los casos, serían menos costosas que en la capital. La disponibilidad de enlaces con la línea de Alta Velocidad entre Almería y Murcia, sería más factible que en la capital; la disponibilidad de terrenos (salvaguardando los límites del parque natural Cabo de Gata) jugaría a su favor, así como la disponibilidad de acceso a la ZAL de Níjar, a una distancia notablemente inferior que desde Almería.

Habrá que esperar a los próximos días (o semanas) para conocer el alcance de una propuesta que suena cada vez con más insistencia. Sólo hay que contestar a una pregunta: ¿Qué pasa con el puerto de Almería?