Vuelve el Mapa de Ruidos sin ampliar Almería la zona vetada a nuevos bares

El Ayuntamiento descarta de forma defintiva aumentar la Zona Acústicamente Saturada en el Pleno del martes

Almería capital descarta ampliar el ‘coto’ a los bares en el centro histórico

Imagen de una campaña de concienciación contra el exceso de ruido.
Imagen de una campaña de concienciación contra el exceso de ruido.

El Mapa Estratégico del Ruido, el instrumento que le sirve de base a los ayuntamientos para, entre otras cuestiones, delimitar las zonas acústicamente saturadas y, por tanto, en las que no se concederán nuevas licencias de apertura a bares, restaurantes o locales de copas, retorna al Salón de Plenos para su aprobación definitiva, después de someterse al periodo de alegaciones.

Será el próximo martes, en la sesión convocada por la alcaldesa en la que la Corporación retomará el Mapa, casi un año después de su aprobación inicial. Se trata de una actualización, habiendo descartado el Ayuntamiento ampliar las ZAS.

La decisión se tomaba en 2024 después de que Urbanismo volviera a sacar a las calles los sonómetros y recoger los posibles excesos de decibelios de los distintos emisores, tales como la propia circulación vial o la procedente de la actividad hostelera. La actualización es obligatoria legalmente cada cinco años, siendo en 2021 cuando las mediciones de sonido sí desembocaron en la decisión de duplicar la ZAS, abarcando aproximadamente desde el parque Nicolás Salmerón hasta Puerta Purchena.

El resultado de los últimos controles al objeto de revisar el Mapa de Ruidos determina la necesidad de mantener los actuales límites donde no cabe ni un negocio de hostelería más y descarta la conveniencia de ampliar este radio de protección.

La empresa especializada Virocem es la que se ocupó el pasado año de supervisar los niveles sonoros tanto de el primer ámbito de la ZAS de 2011, que llegaba hasta plaza San Pedro, como del área extendida hasta Puerta Purchena una década después. El muestro abarcó en total 124 puntos repartidos por toda la aglomeración de Almería, cuarenta de los cuales han estado dirigidos a mediar la contaminación acústica de la actual ZAS, distinguiendo los días laborales de las noches de los fines de semana.

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