El Almería de la otra liga

Que el Almería tiene madera para permanecer en Primera División, lo dicen los números. No sólo los reales, puesto que los de Francisco todavía continúan fuera de los puestos de descenso y han estado alejados casi siempre en lo que se lleva de primera vuelta, sino también los virtuales. Y es que para el Comunio, los rojiblancos deberían estar tranquilamente instalados en la zona media, viendo el peligro desde bien lejos.

Sin embargo, una cosa son los méritos contraídos por el equipo y otra son los resultados obtenidos, en los que los fallos tienen un papel más importante que los aciertos. Aunque individualmente el Almería tiene calidad para optar a no vivir con el agua al cuello, colectivamente las cosas no terminan de salirle y los puntos no han terminado de subir al casillero que marca la Liga de Fútbol Profesional.

Además de los partidos que cada semana juegan los pupilos de Francisco, hay otra liga en la que compiten sus otros yo. Se trata del Comunio, un juego virtual que se ha hecho tan famoso como las quinielas y que ha superado con creces al PC Fútbol o a la Liga Fantástica. Como cada aficionado al balompié lleva un entrenador dentro, con esta aplicación cada comuniero es un mánager que hace su propio equipo. Los futbolistas más codiciados, obviamente, son los que ofrecen un mayor rendimiento real y un periodista deportivo se encarga de puntuarlos y valorarlos.

Lo cierto es que algunos futbolistas almerienses son de los más deseados del juego. Édgar Méndez y Trujillo, curiosamente dos jugadores que proceden del filial, son los que mejor rendimiento están dando para los encargados de dirigir el juego. Verza y Jonathan Zongo también gustan mucho en este fútbol virtual, lo que más o menos no difiere del rendimiento real que están dándole esta temporada a Francisco y de la opinión que la gente tiene de los baluartes de la plantilla.

Con estas puntuaciones individuales, importantes para nueve jugadores, normales para cinco y bajas para otros once [todos los equipos tienen veinticinco futbolistas, por lo que han incluido a los canteranos Dani Romera, Hicham y Kiu pese a que no han debutado esta temporada], los almerienses estarían más cerca de los puestos europeos que del descenso. 171 puntos con respecto al Córdoba que es el tercero por la cola y a 75 del Villarreal, último equipo que jugaría la Liga Europa de terminar ya la liga.

Como muestra de la certeza del juego, un botón. O mejor, dos. Si la clasificación de la LFP la encabezan Real Madrid, Barcelona, Valencia y Atlético de Madrid, la del Comunio es la misma. El descenso también coincide, al ocupar las plazas del descenso comuniero Elche, Levante y Córdoba. Sin embargo, en la realidad el orden es otro, aunque los tres conjuntos son exactamente los mismos.

Curiosamente el equipo que menos asemeja su rendimiento real a la puntuación de este juego, que sobrepasaría con creces un supuesto quorum de aficionados, es el Almería. Hasta cinco puestos de distancia en la clasificación de la LFP con respecto a la del Comunio. Pese a los malos números que están volviendo a cosechar lo de Francisco, la imagen casi siempre ha sido buena y eso no ha pasado desapercibido para los miles de mánager que desde su portátil o su móvil hacen posible este fútbol virtual. Sin embargo, los errores individuales han costado muchos puntos y de ahí la injusticia de la decimosexta posición en la tabla real, la que dará la gloria o el infierno al final de temporada.

Para finalizar con el análisis, hay una estadística que llama mucho la atención y demuestra que el duopolio Madrid-Barcelona, ya no es tan exagerado como en las últimas temporadas. En el once ideal del juego, Madrid y Valencia son los dos equipos que más jugadores aportan, con tres cada uno. El Barcelona, por contra, sólo tiene dos y la diferencia en puntos de Messi y Neymar con el resto, no es tan grande como la de Cristiano Ronaldo, sin duda, el futbolista más importante del juego y de la realidad. Celta, Málaga y Atlético de Madrid completan ese once, en el que Édgar y Trujillo se quedan a nueve puntos de entrar en la medular y la defensa, y el meta Rubén a dieciocho.