El Almería jugó ayer en Lorca su último amistoso de la pretemporada. El equipo de Gonzalo Arconada ganó un partido en el que se evidenció que el estreno de Liga en Bilbao está a una semana vista. Además, a esta circunstancia se le debe añadir el hecho de que el de ayer era el segundo encuentro que jugaba el Almería en dos días. Estos fueron los motivos por los que jugadores de la talla de Negredo, Piatti, Bruno o Julio Álvarez no fueron siquiera convocados. Por contra, la nota positiva de la cita fue el debut de un Diego Alves recién llegado de Pekín.

El partido, en líneas generales, fue bastante aburrido. Así, la primera parte no tuvo un claro dominador. Los dos equipos gozaron de numerosas ocasiones para adelantarse en el luminoso. De hecho, Kalu Uche primero (16') y Corona después (23') dispusieron de claras ocasiones como para batir la meta rival. Sin embargo, fue en el minuto 39 cuando, a la salida de un córner, Carlos García remató a gol desde el área pequeña un centro de Crusat. Mientras tanto, el Lorca se limitaba a intentar mover la pelota. Fruto de su tesón, el conjunto murciano puso a prueba a un Alves que respondió impecable (21').

En la segunda mitad el partido continuó con idéntico guión. Las oportunidades se sucedían con cuentagotas, pero en esta ocasión iba a ser el Lorca quien tuviera el acierto de empatar el partido. Así, en el 57', una gran jugada del equipo local terminó con el gol de cabeza del delantero Perona. La reacción almeriense no tardó en llegar, y en el 70', un balón dividido dentro del área murciana fue aprovechado por Crusat para hacer el segundo gol. Cinco minutos más tarde, y en una acción casi calcada a la anterior, Mané pudo ampliar las distancias pero el marcador ya no se movería.

Con la victoria de ayer, el Almería cierra una brillante pretemporada en la que el nuevo equipo de Arconada no ha perdido ninguno de los partidos que ha jugado. No obstante, será a partir del domingo cuando realmente se pueda valorar a este nuevo Almería.