No les da tiempo casi ni a descansar. En las últimas semanas han disputado la Eurocopa, la dos fases clasificatorias de la Liga Europea y el Campeonato de España de selecciones autonómicas. Este fin de semana juegan con el Valencia CF el campeonato regional de la Comunidad Valenciana. Y en agosto tienen a la vista la súper final de la Liga Europea y el que es el gran objetivo, la clasificación para el Campeonato del Mundo. Francisco Jesús Donaire, Antonio José Mayor y Raúl Mérida, futbolistas, y Ángel López, técnico, alternan su trabajo en Almería con las competiciones por distintos puntos del mundo cada semana. Y, por ahora, los logros les dan la razón y justifican tanto esfuerzo.

Nos ponemos en antecedentes. Allá por 2003, Ángel López era un apasionado del fútbol-playa, entonces una modalidad deportiva incipiente, que organizaba torneos locales en la playa del Zapillo. Hoy en día es seleccionador andaluz, segundo entrenador de la selección española masculina y máximo responsable técnico de la femenina, además de entrenador en el Valencia CF, hasta donde se ha llevado a Dona, Antonio José y Raúl Mérida. Con él va Juan Jesús Arias, el mejor portero almeriense de fútbol-playa en los años iniciales de este deporte hasta que Dona le desbancó para ser el mejor portero del mundo, y que ahora es su mano derecha en el conjunto ché y en el combinado autonómico.

Han llegado de Sanjenjo (Pontevedra) hace escasas horas, tras haber disputado la segunda fase previa de la Liga Europea, que han conquistado con España de la misma manera que una semana antes lo hicieron en la primera en Moscú (Rusia), y el Campeonato de España, en el que han representado a Andalucía, sin Raúl, ausente por motivos laborales, pero con otros almerienses como Córdoba, Juan Jiménez o José Enrique, jugadores que están también en la órbita de la selección nacional que dirige Joaquín Alonso.

Antonio José no puede acudir a la cita en el Paseo Marítimo, igualmente por motivos laborales. Raúl y Ángel están puntuales, con Dona sufriendo un ligero retraso a causa de los problemas de tráfico y aparcamiento. Es verano y El Zapillo está masificado. Un abrazo cuando se incorpora y continúa la entrevista, que ya ha comenzado. Antes de que llegue, Raúl, off the record, asegura a Ángel que "no es porque sea mi amigo, pero Dona es el mejor portero del mundo" y que "un portero es el 80% del equipo en este deporte".

España no pudo reeditar el título en la Eurocopa de Belgrado (Serbia) al caer en cuartos de final frente al defensor del título, Portugal, aunque se repuso venciendo en las dos fases de la Liga Europea en Moscú y en Sanjenjo, que le han dado el pasaporte a la súper final de Catania (Italia) en agosto, mes en el que también deben afrontar la clasificación para el Mundial, el gran objetivo del año.

Almería es una potencia en fútbol-playa. Con cinco jugadores en la autonómica -sin contar a Raúl- y tres en la española, además de Ángel como técnico, lamentan que "somos un deporte minoritario y no tenemos reconocimiento; en Almería tampoco te respalda nadie, estábamos pidiendo favores, y cuando se presenta la opción de ir al Valencia, un equipo de Primera División, no lo pensamos", afirma Ángel, aunque "últimamente, desde que se televisa, sí recibimos el cariño de la gente", apunta Dona, para quien "la atención de los medios aquí se centra en el Almería de fútbol pero hay más deportistas en todos los ámbitos que hacen cosas importantes y la gente debería saber que en Almería hay gente muy válida y que tiene mucho mérito".

La pasada temporada, como Club Natación Almería -donde entrenan ante la falta de instalaciones en la playa almeriense- fueron campeones de España, pero tuvieron que renunciar a jugar en Europa por falta de apoyos. Antes, el club jugó una temporada como UD Almería, gracias a la presencia de José Ortiz Bernal, aunque luego el club no siguió con su apoyo. Quiso hacerlo solo con la camiseta.

"Ha sido fruto casi del azar encontrarnos en la arena", explica Ángel, "en esos años en los que empezábamos no había mucha gente que dedicara su tiempo a entrenar, y ellos, desde que eran juveniles, venían a horas a las que nadie se mete en la playa y ahí se empezó a fraguar todo esto". "Ángel no es solo nuestro entrenador, es nuestro amigo", añade Dona, que recuerda que "traíamos las porterías y las poníamos en la playa, aunque la gente nos miraba mal".

Hoy la gente también los mira, en las gradas de los estadios a los que acuden por todo el mundo, en cifras de cuatro y cinco mil espectadores, o por la televisión. Son estrellas mundiales, aunque no pueden vivir del fútbol-playa. Tienen su trabajo aparte, que en algunos casos les da facilidades, como en el caso de Dona, que trabaja en los gimnasios Gym Tonic y del Club de Mar de Almería, o le impide estar, como en el de Raúl, antes comercial y ahora en una gasolinera.

"Lo que tiene el fútbol-playa que lo hacen distinto son las acciones de chilena, que no se ven tan fácilmente en fútbol once, y que un partido que va 4-0 se puede levantar fácil, porque cualquier bote en la arena te complica", relata Dona, para quien, como al resto, sería un sueño disponer de un estadio permanente en Almería para la práctica de los deportes en playa.