La Escuela de Fútbol EDA despidió este viernes la campaña 2018-2019 con una jornada lúdica en la que se hizo entrega de una medalla a cada uno de los aproximadamente 200 niños y niñas que han estado este año en esta escuela dirigida por Miranda y Héctor Berenguel, que ha cumplido su segundo año. El campo Rafael Andújar fue escenario de un acto que contó con la presencia de los técnicos Fran Fernández y Francisco, de José Ortiz, exjugador de la UD Almería, y de Bruno Iribarne, futbolista almeriense que milita en el conjunto cadete del Real Madrid. También estuvo presente en este evento de clausura del curso Juanjo Segura, concejal de Deportes del Ayuntamiento de Almería.
Acompañados por sus familiares, las decenas de pequeños que militan en EDA, con edades comprendidas entre 4 y 12 años, recibieron su merecida medalla de manos de Miranda, Francisco, FF, Iribarne y Segura, posando posteriormente cada equipo, repartidos por categorías, con todos ellos. Además, muchos padres pidieron a los más que conocidos técnicos almerienses que se fotografiaran con sus pequeños al terminar el acto principal.
La jornada dejó imágenes más que curiosas. Los críos mostraron un rostro de gran ilusión al ver a los que posiblemente sean sus referentes almerienses en el mundo del balompié, dos técnicos cuyo futuro sigue a día de hoy en el aire y que compartieron unos minutos de charla y un fuerte abrazo nada más verse en el feudo del Zapillo Atlético, campo donde juega el equipo del barrio en el que ambos nacieron y se criaron, al igual que José Ortiz.
En nombre de la Escuela de Fútbol Educación Deportiva Almeriense (EDA) habló para este diario Miranda, que espera "superar los doscientos críos el próximo curso". El también exfutbolista destacó la labor de sus monitores, que durante toda la temporada han estado formando a los pequeños de lunes a jueves, de 16:00 a 18:30 horas, y dirigiendo a los equipos federados los viernes y los sábados.
Niños y niñas, monitores e invitados a la entrega de medallas posaron para finalizar en la grada del Rafael Andújar en la tradicional foto de familia, una imagen que deja claro que EDA sigue creciendo y que cuenta con el apoyo del pasado, presente y futuro del balompié almeriense.
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