Ecoculture Costa de Almería lo intentó desde el principio poniendo mucha intensidad en cada de sus acciones y haciéndose fuertes en defensa para superar el ecuador del cuarto con esperanza (11-1). Ciudad de Huelva entró en el partido tarde pero tuvo que tomárselo en serio y, poco a poco, recortaba la distancia hasta llegar al final del cuarto 2 abajo (17-15)

El panorama parecía cambiar en el segundo cuarto, cuando dos triples de Joaquín Reyes y uno de Juanmi Molina despegaba de nuevo a los almerienses (31-19). Llegó la parada táctica de Pedro Vadillo que consiguió frenar algo el ímpetu rojillo. Los locales lo intentaban con todo, apoyados por el empuje de la grada, pero dos triples consecutivos de Fran Cárdenas frenaba el parcial. Al descanso, 39-29.

Tras el paso por vestuarios, los rojillos salieron dispuestos a dejarse la piel en la pista. Su férrea defensa y dos triples de Casini elevaban la distancia a la veintena de puntos, obligando al técnico onubense a pedir de nuevo tiempo muerto (51-31). Volvió Ciudad de Huelva a intentar alargar sus posesiones para jugar con la diferencia que traían del partido de ida y encontraron en Mansour Kassé y en la experiencia de Víctor Pérez la clave para rebajar la desventaja. En el período definitivo se entraba con un claro pero insuficiente 59-42.

En un último arreón, fraguado entre Marsico y Koyanouba, Ecoculture Costa de Almería tomó oxígeno para firmar un parcial de 11-0 y llegar a la máxima diferencia a falta de 5 minutos (70-42). Pero el reloj jugaba en su contra y el cómputo global obligaba a no fallar en ninguno de los ataques, cosa complicadísima ante un equipo tan compacto como el onubense. El intercambio de canastas y tiros libres en los minutos finales dejó el electrónico en 80-58 y un buen sabor de boca en la afición local para terminar una gran temporada.