España no tuvo problemas para dar buena cuenta de la bisoña selección griega, que apenas pudo mantener el tipo apoyada en tres jugadoras, la pivote Mastaka, la lateral zurda Tsakalou y la extremo del mismo flanco Panagiotidou, que llevaron el peso anotador de una mermada parcela ofensiva de las helenas, que tampoco brillaron en el aspecto defensivo. 

Mucho tuvo que ver en ello el alto ritmo imprimido desde salida por el combinado de Carlos Viver, que jugó a una velocidad muy alta con rápidas transiciones culminada con éxito en los primeros compases por Alexandrina Cabral, a quien luego le tomó el relevo en el aspecto anotador Jennifer Gutiérrez y Marta López. 

Con 8-3 de margen al cuarto de hora de juego, Viver no dudó en arrancar un carrusel de rotaciones para darle tiempo a todos los efectivos del equipo pensando también en el duelo del fin de semana ante Austria. El aliciente para la afición local estuvo en ver a la capitana Carmen Martín, natural de Roquetas de Mar, con 220 internacionalizadas a sus espaldas.

La selección griega no gozó de ventaja en ningún momento durante la primera mitad, en la que España acumuló una ventaja máxima de nueve tantos (15-6) y que concluiría con seis arriba para las 'guerreras' (15-9).

Tras la reanudación el cuadro heleno intentó reaccionar y de hecho llegó a ganar el segundo parcial por 2-3, pero apenas fue un espejismo y España amplió distancias en el electrónico certificando su buen partido coral con el hecho de que todo el equipo anotó al menos un gol hasta el 33-18 final. Las 'guerreras' inician de forma brillante su camino hacia la Euro 2020 en Almería.