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Feral llega a Granada para buscar soluciones y tender la mano a sus vecinos

Actualmente estamos en una época convulsa. El agua ha dejado de ser algo importante, para pasar a ser algo urgente. José Antonio Fernández, presidente de la Federación, analiza la situación actual de los regantes almerienses. Una voz más que autorizada y que actualmente vive para buscar y dar con la solución a los problemas con los que lidian los agricultores de la provincia. Y no son pocos. La diferencia es que se ha llegado a ese punto en el que parece que toda la sociedad está concienciada en que hay que decir basta a un déficit hídrico que tiene solución, y que no puede venir a cualquier precio.

Uno de los frentes en los que se trabaja es conseguir que el agua almacenada en la presa granadina de Rules deje de verterse al mar y se incorpore cuanto antes al campo almeriense. Esta opción se considera un recurso estratégico capaz de resolver el déficit hídrico de una provincia como Almería, que padece una sequía permanente.

"Estamos trabajando con la idea de traer el agua de Rules. Ya nos hemos reunido con la Comunidad General de Regantes del Bajo Guadalfeo y tenemos un principio de entendimiento con ellos. Desde ahora mantendremos una relación estrecha. Les presentamos un estudio previo que hemos desarrollado, al igual que a las Administraciones, con la Autovía del agua entre Rules y Cuevas del Almanzora. Hemos demostrado que es viable", subraya el presidente de Feral, quien revela que de esta reunión con los regantes granadinos se han sacado muchas cosas positivas: "Les hemos ofrecido que se asocien a Feral, ampliándola así a Granada. Todo se va a estudiar. Ellos también tienen sus problemas y nosotros les podemos ayudar".

Según Manuel Vizcaíno, ingeniero granadino jubilado y que asistió recientemente a la última jornada técnica de Cajamar sobre el mercado del agua, hay del orden de 74 hectómetros cúbicos 'sobrantes' para los regantes de la Cuenca del Guadalfeo y que se podrían pllevar a las zonas deficitarias de Almería. El proyecto está encima de la mesa. Habría que instalar una tubería de mayor diámetro y es necesaria la subvención, aunque los agricultores almerienses están dispuestos a lo que haga falta para su consecución. Como siempre han hecho.

La comarca del Poniente quita el sueño a Feral. Su situación hídrica es complicada, "se puede decir que este último año ha saltado la alarma de falta de agua debido principalmente a la insuficiencia producida en el pantano Benínar, que a priori debía haber tenido agua suficiente. Incluso ha habido momentos puntuales del otoño en los que ha faltado. Desde las comunidades de regantes de la zona estamos trabajando para que no vuelva a ocurrir en esa primavera, y así el pantano se va recuperando o la desaladora va produciendo más cantidad de agua", analiza Fernández. "Siempre hemos tenido esos dos recursos, junto a los pozos, pero la situación es crítica y ha llegado el momento de mirar otras opciones", asegura el presidente.

Desde Feral, plantean el agua de la presa de Rules como algo básico, pero además, también está la opción de "recoger el agua de lluvia, que no es ninguna tontería. Yo apoyo este sistema para complementar el abastecimiento, pues hay que tener en cuenta que nos puede suponer 40 hectómetros de agua más o menos", explica Fernández sobre una técnica que permitiría conseguir 2.000 metros cúbicos por hectárea y año.

La idea sería mezclar ese agua de lluvia con la del maltrecho acuífero superior, para así ir facilitando también su recuperación. "Obtendríamos un agua de excelente calidad para los cultivos de la zona, con una conductividad de entre 1 y 1,5. Con esas mezclas podemos llegar a los 2.000 metros cúbicos por hectárea y año. Eso significa que una tercera parte del consumo de agua de la comarca en los invernaderos la podemos conseguir de nuestros propios recursos. Es algo que ya se está haciendo, pero el problema es que en la comarca ya están construidos todos los invernaderos y esto se debería hacer apoyado por fuertes subvenciones por parte de la Administración", explica el responsable de Feral.

Otro de los caballos de batalla es el precio del agua, desde Feral se apuesta y se persigue alcanzar la tarifa únificada. "A nosotros nos meten en la zona Mediterránea todas las desaladoras y en el interior, en la España húmeda, tienen sus pantanos donde no son partidarios los políticos los trasvases. No sé a que costes vendrían, pero nosotros los que tenemos con las desaladoras son enormes. Por eso apostamos desde la provincia de Almería por esa unificación, ya que tenemos los costes más altos con respecto al interior, cuando nosotros producimos y creamos más puestos de trabajo que nadie".

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