Mitos y leyendas
La consulta del especialista
El mundo del deporte, como todo en la vida, está rodeado de una serie de mitos y leyendas que para nada tienen que ver con la realidad · En el artículo las analizamos y les damos consejos para una vida saludable
COMO todo en la vida, y el deporte, no es una excepción, hay leyendas urbanas, mitos y creencias relacionados, que en muchos casos, rozan el esperpento.
En este artículo vamos a analizar las más extravagantes y disparatadas de las que existen en nuestro medio.
1.-Sudar adelgaza. FALSO
Cuando se practica alguna actividad física con cierta intensidad, empezamos a sudar. Sudan antes aquellas personas más pesadas que las más delgadas. El sudor no es más que un refrigerante ante el aumento de la temperatura que se produce con el ejercicio. De esta manera, la temperatura corporal se mantiene más o menos constante. Con frecuencia, cuando corro, veo a personas que en pleno verano van entrenando con un chubasquero o ropa no transpirable, con el objeto de sudar más y perder peso más rápido. Grave error. El peso que perdemos sudando lo recuperamos bebiendo. Lo que adelgaza es perder grasa, no agua corporal. De hecho, debemos beber un litro de agua por cada kilo que hayamos perdido entrenando.
2.-El ejercicio en ayunas adelgaza más. FALSO
No hay una hora que sea más eficiente a la hora de perder peso. Depende de cada persona; hay algunos que preferimos por la mañana, otros a última hora de la tarde. Si hacemos deporte en ayunas, no debe sobrepasar la hora. A partir de entonces, tendremos fatiga, cansancio y hasta sufrir un mareo, si no estamos acostumbrados. Si decidimos hacer deporte por la tarde o noche, que hayan pasado, al menos, dos horas y media desde la última comida fuerte.
3.-Beber agua durante el ejercicio provoca flato. FALSO
El flato es el dolor que se sitúa debajo de las costillas, en el lado derecho, científicamente llamado hipocondrio derecho. Es la zona donde anatómicamente se situa el hígado. El flato es dolor provocado por la inflamación/irritación de un músculo muy importante para la respiración como es el diafragma. Si no lo utilizamos correctamente con un ritmo respiratorio adecuado, funcionará de forma anómala y aparecerá el dolor. Esto también ocurre si bebemos agua abundante, tragamos aire y descompensamos el ritmo de la respiración. Lo mismo ocurre cuando hacemos ejercicio inmediatamente después de comer. Cuando hay comida en el tracto digestivo, se produce un conflicto de espacio con el diafragma, provocando flato.
4.-El exceso de barriga se elimina haciendo abdominales. FALSO.
A los hombres, el exceso de grasa se nos acumula en la región del abdomen, alrededor del ombligo. A las mujeres, en cambio, se les acumula en la zona glútea, la tan odiada celulitis. Por muchas abdominales que hagamos, NUNCA conseguiremos perder la barriga. Esta se pierde, quemando grasa, haciendo ejercicio aeróbico como andar, correr, bicicleta, aerobic… Cuando hacemos ejercicio y a una intensidad del 50-70% de nuestra capacidad máxima, el combustible que usamos es la grasa. Si la actividad es más intensa, entonces serán los hidratos de carbono en primer lugar y la grasa después. La única manera de eliminar grasa de un sitio concreto es mediante una liposucción. Cuando se pierde grasa, se suele hacer en todo el cuerpo y no en regiones o localizaciones concretas.
5.-Con la menstruación no se debe hacer ejercicio. FALSO
Este momento es bueno, como cualquier otro momento del mes para hacer deporte. Hay estudios que avalan al ejercicio como reductor de las molestias y dolores menstruales, así como los cambios de humor que en ocasiones se asocian con esos días. Lo que sí es importante es aumentar la ingesta los días en los que se hace ejercicio con la menstruación, especialmente de hierro. De esta manera evitaremos anemias debidas a la escasez de este mineral en los depósitos corporales. No se recomienda realizar actividades físicas muy exigentes ni extenuantes durante esos días.
6.-Cuántas más proteínas tome, más músculo se formará. FALSO.
Este tópico es muy extendido entre los culturistas y asiduos de gimnasio. El organismo tiene un tope de alrededor de 2 gramos por kilo de peso cada día para poder metabolizarlas. Si además de nuestra dieta normal, sobrecargamos el organismo con una dosis extra de proteínas, nuestro páncreas, órgano que fabrica la insulina, sufrirá y tendremos problemas a largo plazo. Además, nadie nos garantiza que esas proteínas de más, vayan a ir a los bíceps, tríceps u otros músculos que estemos interesados en potenciar. Es muy posible que se acumulen en zonas que no nos interesen que para el cuerpo sí sean prioritarias. Solo se recomienda una dosis extra de proteínas en situaciones de muchas exigencia física, como es el caso de deportistas profesionales.
7.-El agua con azúcar ayuda a prevenir la aparición de agujetas. FALSO
Las agujetas no es más que el daño que una actividad física desproporcionada o demasiado intensa, provoca en la fibra muscular. Si no estamos muy acostumbrados al ejercicio, nuestra fibra muscular se estira y acorta, pudiendo producir pequeñas roturas. Mientras el músculo está caliente y en funcionamiento, no lo percibimos. Pero cuando éste se enfría (normalmente a las 24 horas), se ha producido una contracción de la fibra muscular con su correspondiente acortamiento. Al caminar o al realizar la actividad física donde ejercitamos los músculos doloridos, nos sobreviene el dolor clásico de las agujetas. La mejor manera de prevenirlo es realizar una actividad física regular y no ocasional y si el dolor es importante, tomar un antiinflamatorio. En dos o tres días se habrá solucionado.
8.-El ejercicio físico mejora la vida sexual y nos hace más felices. VERDADERO.
Hay estudios que reflejan que el ejercicio físico regular hace que aumenten en sangre las endorfinas, las llamadas, hormonas de la felicidad. Estas van a relajarnos, canalizar el estrés y a elevar nuestra libido, provocando un aumento en la frecuencia de relaciones sexuales hasta en un 30% más al año. Esto se produce, siempre y cuando, el ejercicio no sea extenuante y lleguemos a casa completamente rotos. En el equilibrio está la virtud.
También te puede interesar
Lo último