El Atlético Pulpileño firma su primer empate de la presente campaña tras igualar 1-1 en el feudo del Real Murcia, un más que complicado escenario donde los almerienses lograron mantener su racha positiva como foráneos pese a que tuvieron que ir a remolque en el tanteador durante más de veinte minutos.

Los locales se hicieron con el dominio del esférico desde el comienzo ante un cuadro almeriense que sufría más por no tener el balón que por ocasiones de los murcianos. El Pulpileño no generaba a la contra, se precipitó mucho cuando recuperaba la pelota en un primer tramo de contienda en el que el peligro brillaba por su ausencia en una y otra área. Serna y Erik tuvieron muy poco trabajo. La primera parte murió con el cero a cero, destacando solamente un disparo de Diego López desde la frontal del área que se fue muy lejos de la meta del Murcia. 

Tras la reanudación salió muy enchufado el Pulpileño, consciente de que tenía opciones de llevarse algún premio del complicado campo Enrique Roca, como ya hizo en El Ejido y en Elda. Y cuando más entonado y valiente estaba el cuadro de Sebas López, llegó el tanto de los murcianos. Error garrafal en defensa, con una mala cesión a Erik en la que estuvo muy atento un perro viejo como Carrasco, que se hizo con el esférico, definió genial el mano a mano y puso el 1-0 en el 49'.  

El tanto fue doloroso por la forma en la que llegó, por un error propio, pero no hundió a un cuadro del Levante almeriense que se lanzó a la desesperada a por el empate. Casi lo logra en el 60', de nuevo con un remate de Diego López, que estaba siendo el rojinegro que más inquietaba la meta de un equipo murcianista que empezaba a ver como los visitantes avisaban. Y como suele decirse, quien avisa no es traidor. La insistencia pulpileña tuvo su premio en el 77', en un potente disparo de Cristo García que supuso el 1-1. Los de López defendieron con mucha cabeza hasta el final y se marcharon con un punto muy merecido que les sabe a gloria.