Al mediodía de ayer el cuerpo técnico de la UDA emitió un suspiro al conocer que el emparejamiento de la tercera ronda de Copa del Rey (la segunda para equipos únicamente de la Liga 1,2,3) había sido benévolo por el rival y por jugarse en el Estadio de los Juegos Mediterráneos.

En concreto, la bola que salió instantes después de la rojiblanca fue la del Reus, rival de la misma liga que los almerienses, aunque figure a la cola de los topes salariales de la categoría, según los datos que la Liga de Fútbol Profesional hizo públicos el pasado jueves [6,9 de los rojiblancos por 3,1 de los rojinegros]. Lo mejor de todo es que el equipo no tendrá que viajar, sino que jugará en casa, por lo que el cansancio y el desembolso económico será prácticamente insignificante.

El encuentro que se jugará a mediados de octubre -la fecha oficial es la del día 17- en día y horario por fijar todavía. Llegará tras el Almería-Las Palmas de la Liga 1|2|3 y antes de viajar en la siguiente jornada al Carlos Belmonte de Albacete.

Fran Fernández, que comparecía en rueda de prensa para hablar del encuentro de Liga contra el Zaragoza nada más conocerse el resultado del sorteo de la Copa del Rey, manifestaba que "todavía queda un mes para esta eliminatoria y nuestra mente está puesta única y exclusivamente en la Liga". En cualquier caso valoraba positivamente el hecho de jugar en casa y catalogó de "difícil y complicado" al Reus que dejó en la cuneta del torneo a Osasuna y encima en su campo, de donde los rojiblancos salieron derrotados en la última jornada liguera.