Apenas habían transcurrido treinta minutos de la sesión preparatoria de este martes en el anexo del Power Horse cuando saltaban las alarmas en el seno de la UD Almería: Luis Suárez, el único delantero centro puro que tiene sano hoy por hoy Rubi debido a la lesión de larga duración de El Bilal Touré y las molestias que han impedido a Dyego Sousa ejercitarse la última semana, se marchaba cabizbajo con una aparente lesión muscular. 

De confirmarse los peores presagios, el plantel viajaría a Vigo para medirse el domingo al Celta (14:00 horas) sin claras referencias ofensivas en la delantera, puesto para el cual el técnico catalán tendría que improvisar con Leo Baptistao o Largie Ramazani. El extremo belga se incorporaba este martes al trabajo tras marcar y asistir el lunes por la tarde en un amistoso con el combinado sub-21 ante Japón. 

Ramazani viene de marcar y asistir con la sub-21 belga ante Japón

Debido a la coyuntura de escasez de atacantes, el cuerpo técnico citaba nuevamente a los juveniles Marciano Sanca y Rachad Fettal, que tienen muchas probabilidades de entrar en su primera convocatoria con el primer equipo e incluso poder debutar oficialmente el domingo en tierras gallegas. 

Las malas noticias continúan habida cuenta de que tanto Dyego Sousa como Alejandro Pozo siguen al margen. El ariete luso-brasileño ni siquiera se dejó ver por el anexo al seguir en manos de los médicos rojiblancos, mientras que el carrilero sevillano sigue a las órdenes del recuperador físico ejercitándose por su cuenta, por lo que es seria duda para el reinicio liguero. 

Samu Costa (que juega con la sub-21 portuguesa a mediodía ante Rumanía) y Martin Svidersky, concentrado con la sub-21 eslovaca, está previsto que se reincorporen a la disciplina rojiblanca este miércoles.