Sergio García pone fin a la sequía en Dubái

Sergio García se atrevió con el amarillo en la última ronda del Omega Dubai Dessert Classic. Era tal su confianza que se dejó de malos pensamientos sobre el color de la indumentaria. Había dominado con control férreo, de cabo a rabo, el torneo que cerraba la gira del desierto y su expresión denotaba tranquilidad. Visualizaba la victoria. El castellonense cumplió con los pronósticos y se anotó el triunfo con un incontestable -19 después de marcarse un 69 (-3) en la ronda final y mantener a raya a un oponente peligrosísimo como Henrik Stenson (-16), el sueco que protagonizó un duelo memorable en último Open Británico para derrotar a Phil Mickelson.

García, amén de embolsarse 410.000 euros, vuelve al Top 10 mundial tras empezar decimoquinto la cita en el emirato y devolvió la sonrisa a los aficionados españoles, que no saboreaban la victoria de un golfista nacional en el European Tour desde que Pablo Larrazábal ganara el BMW International Open en Alemania en verano de 2015.

Festejó a lo grande el jugador de Borriol su certamen número 250 en el circuito europeo sin sufrir excesivos agobios ante la presión del sueco, que desde hoy se encarama al tercer puesto en el ranking mundial. Stenson capituló en el hoyo 15, cuando, obligado a atacar al colocarse a sólo dos golpes del español, se pasó de palo o de fuerza en el par 3, enzarzándose su bola con el rough de detrás del green. Acto seguido, García dio un impacto primoroso desde el tee para dejar la pelota a medio metro de la bandera. Birdie para el español y bogey para el nórdico. De nuevo cuatro golpes de distancia con sólo tres por disputarse.

Aún necesitó García sacarse de la chistera una aproximación precisa en el 16 para salvar el par e impedir a Stenson agarrarse a los dos últimos hoyos para derrocar al castellonense, que jugó un golf de alta escuela durante los cuatro días de un torneo que ya ganaron Severiano Ballesteros (1992), José María Olazábal (1998), Miguel Ángel Jiménez (2010), Álvaro Quirós (2011) y Rafa Cabrera Bello (2012).

Pletórico tras alcanzar la corona, García resumió la semana como "fantástica por la manera que he jugado y por haberme mantenido siempre arriba; tiene mérido ganar a un golfista como Stenson". El español, tercero en la Race to Dubai, desea mantener "este nivel en un par de semanas", cuando empiece a competir en Estados Unidos, donde hace ocho días se anotó su primer triunfo en el PGA Tour el jovencísimo vizcaíno Jon Rahm, quien está asombrando al circuito desde que se hiciera profesional el pasado verano.

Los otros españoles en liza en Dubái no pudieron lucirse en la vuelta decisiva. Compartieron codo con codo la undécima posición Rafa Cabrero Bello y Nacho Elvira (-9). El primero se recuperó de un mal arranque para terminar el día con dos menos y el segundo, con problemas en el cuello, fue de más a menos en la cita y firmó un magro par final.