Soriano da otro sí, quiero

En apenas tres semanas Fernando Soriano le ha dado el 'sí, quiero' en dos ocasiones a Alfonso García. La primera fue el pasado 16 de mayo cuando, tras la destitución de Néstor Gorosito y viéndose en un callejón sin salida, el empresario murciano optaba por darle las riendas del banquillo a su futbolista más veterano, gran conocedor del vestuario.

Resteban cuatro jornadas para el término de la competición y pintaban bastos, pero una racha de 8 puntos sobre 12 posibles conseguida con el técnico maño al frente permitió eludir el fantasma del descenso a Segunda B. La renovación era cuestión de sentarse a hablar y ayer lo hicieron en el despacho que el máximo mandatario unionista tiene en la sede de su empresa, Urcisol, en Águilas.

Allí Soriano le expuso las condiciones que no pudo en la anterior ocasión al ser de forma tan precipitada y urgente. En primer lugar poder rodearse de un staff de colaboradores de confianza que le faciliten su labor diaria, así como cubrir la vacante de la dirección deportiva con alguien que sintonice para planificar juntos la confección de un plantel de garantías.

A cambio de eso Soriano percibirá una retribución aceptable, pero lejos de los números de otros preparadores de la categoría de plata, sabedor de que aún tiene mucha experiencia por acumular. El acuerdo es por una temporada y Soriano, eso sí, se garantiza el compromiso por parte de la entidad de poder seguir vinculado a la misma una vez concluya su relación contractual como entrenador.

Al tratarse de una renovación, el Almería no tiene previsto hacer ninguna presentación oficial al uso, al menos hasta que se vayan conociendo los nombres de su cuerpo técnico y del nuevo responsable de la secretaría técnica.

El anuncio lleva consigo su definitiva retirada como futbolista a los 36 años de edad (en septiembre hacía 37) tras una carrera deportiva iniciada en el Real Zaragoza y continuada en Recreativo de Huelva y la UD Almería, con un año de impás en el Osasuna. En total diez temporadas portando el '23' en la espalda y dos ascensos a Primera con el conjunto almeriense, al que llegó en 2005b de la mano de Paco Flores.

Con su renovación Alfonso García se garantiza asimismo un buen gancho para la inminente campaña de abonos, ya que con la nefasta temporada deportiva iba a resultar muy complicado generar ilusión entre los aficionados.

Soriano, que hasta finales de junio permanecerá en Almeria por el colegio de sus hijas, se pone manos a la obra desde ya para perfilar su primer proyecto arrancando desde cero y sin el agobio del ascenso como meta.