La consulta del especialista

Transplantes de animales a personas

  • Se ha realizado un trasplante de un riñón de un cerdo a una paciente en la Universidad de NYC

Cirujanos del Hospital Reina Sofía de Madrid realizan un transplante.

Cirujanos del Hospital Reina Sofía de Madrid realizan un transplante. / Efe

Se define trasplante como la sustitución de un órgano o una parte del organismo por otra ante el fallo o la ausencia de funcionamiento, cualquiera que sea la causa. En condiciones normales, lo que se intentar cambiar es un órgano vital, como puede ser el corazón, hígado o riñón. Sin embargo, últimamente se están realizando trasplantes de otras partes del cuerpo menos “vitales” pero no menos importantes sobre todo para la persona que soporta el fallo o fracaso de la parte a sustituir.

Tenemos la gran suerte que España es el país que mayor número de trasplantes realiza a nivel mundial. Una compleja y bien estudiada infraestructura es clave para obtener el primer puesto del ranking así como la solidaridad y comprensión de una población muy concienciada.

Sin embargo, una noticia en relación a los trasplantes ha saltado a la opinión pública. Se ha realiza el trasplante de un riñón de un cerdo a una paciente. Dicho así, puede sonar a disparate, pero nada más lejos de la realidad. El Dr. Robert Montgomery ha encabezado el equipo de cirujanos que lo han llevado a cabo en la Universidad de Nueva York. El donante fue un cerdo manipulado genéticamente para que el riñón trasplantado creara una menor reacción injerto contra huésped. La receptora fue una paciente en muerte cerebral, cuya vida está siendo prolongada de forma artificial. El órgano ha continuado funcionando y la paciente orina como si de un riñón humano se tratase. Multitud de estudios se están llevando a cabo para ver la evolución de dicho hito. La cirugía transcurrió con normalidad y el órgano fue colocado en la ingle derecha de la paciente.

Lógicamente, esto ha desatado un sinfín de opiniones, a favor y en contra. En los defensores se alinean todos aquellos que defienden la vida humana a toda costa; una persona no debe vivir a costa de esperar la muerte de otra. El tiempo de espera para recibir un órgano puede durar hasta 5 años, y muchos de ellos, fallecen. Un xenotrasplante (es el trasplante de dos especies diferentes como en este caso) puede aliviar la lista de espera. Ya se usa el cerdo para fabricar válvulas cardíacas que se implantan a humanos.

Un trasplante es la sustitución de un órgano o una parte del organismo por otra ante el fallo o la ausencia de funcionamiento

En el lado contrario, los que piensan que por el hecho que se pueda hacer algo, no quiere decir que se deba. No podemos cruzar esa línea y “experimentar” con personas.

La polémica está servida.

¿Cómo empezó todo?

En 1967 en Ciudad del Cabo, el cirujano jefe del Hospital de Sudáfrica pronunció una palabra mágica: “funciona”. Se refería al momento en el que finalizaba el primer trasplante de corazón y todo el equipo médico admiraba el vital ciclo de sístole y diástole que permite el bombeo de sangre a todo el organismo. Barnard solicitó la donación del corazón al padre de la donante, una mujer con fracturas múltiples por un accidente de tráfico. Después de unos minutos de reflexión, el padre de la víctima respondió a Barnard:”si ya no existe esperanza para mi hija, intente salvar a ese hombre”. El receptor fue un varón de 54 años tenía una miocardiopatía isquémica en estado terminal. Se instalaron donante y receptor, respectivamente, en dos quirófanos adyacentes. Cuando cesó toda actividad cardíaca en el electrocardiograma del donante y se comprobó la ausencia de respiración espontánea y de todos los reflejos durante siete minutos, se declaró muerta a la donante y se procedió a la extracción cardíaca. El injerto se implantó y funcionó. A los diez días el receptor caminaba por la habitación. Una neumonía bilateral provocará su muerte cuatro días más tarde. Un mes más tarde, Barnard realizó su segundo trasplante cardíaco. El receptor vivió diecinueve meses y medio.

Algo que parecía imposible o impensable en ese momento de la historia, se convirtió en un hecho posible y ha permitido que muchos cientos de personas se hayan beneficiado de ese primer gesto médico llevado a cabo por estos pioneros de la cirugía.

Otro genio de la medicina fue el Dr. Joseph Murray, cirujano urólogo americano que en 1954 pudo realizar el primer trasplante de riñón. Se realizó entre dos hermanos gemelos. Por esta gran hazaña, fue premiado con el Premio Nobel de Medicina en 1990. Médicos de todo el mundo reconocen y aplican hoy día sus técnicas y cuando murió en 1993, pacientes operados por él escribieron: “El doctor Murray abrió las puertas a que cientos de miles de personas recibieran trasplantes que les salvaron la vida. Hasta hoy, más de 600.000 personas en todo el mundo han recibido el regalo de la vida a través del trasplante”.

En 1967 un cirujano jefe sudafricano pronunció una palabra mágica: “Funciona”

La historia del siguiente trasplante, el de hígado, viene de la mano del cirujano americano Thomas Starzl. Ya era conocido como pionero en el campo de trasplantes en animales donde describió numerosas técnicas quirúrgicas fruto de su empeño e inteligencia. El 1 de marzo de 1963, Starzl tuvo el primer caso en sus manos en los que poder poner en práctica todo lo aprendido. En Colorado, un niño de 3 años que nació sin vías biliares en el hígado, fue considerado el primer receptor del mundo de un trasplante hepático. Desgraciadamente el resultado fue peor de los esperado y el niño murió a las pocas horas de la cirugía. Varios meses después, se realiza un nuevo intento ya en un adulto. El paciente muere a los meses por otros motivos pero la función hepática fue normal.

Estamos solo al principio de una nueva línea de trabajo. No siempre se entienden los avances de la medicina hasta que se comprueban su utilidad y beneficio para la humanidad. Estamos a la espera de ver publicados los resultados pero resulta realmente esperanzador este avance.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios