Turno para Rubi en la 'pasarela' de Águilas

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Alfonso García se da de plazo hasta mañana para tomar una decisión, por lo que Rivera gana enteros para sentarse el domingo en Gerona

Joan Francesc Rubi charla con Sergi cuando éste dirigía al Recreativo.
Joan Francesc Rubi charla con Sergi cuando éste dirigía al Recreativo.
Paco Gregorio Almería

08 de octubre 2015 - 05:02

Parecía que Alfonso García tenía atado y bien atado al sustituto de Sergi tras mandarlo al paro el sábado por la noche, en atención a la rapidez en el proceder y la convicción de la decisión. Sin embargo cinco días después no hay reemplazo y el asunto amenaza con prolongarse al menos hasta mañana viernes, plazo que se ha dado el presidente para escuchar las distintas alternativas en caso de que ninguna le convenza.

La particular 'pasarela' en la que ha convertido su despacho de Urcisol en Águilas tuvo ayer como técnico invitado a Joan Francesc Ferrer Sicilia (Vilasar de Mar, 1970), alias Rubi, que tiene buen predicamento en el club desde que Girona y Almería coincidieron en el play off a Primera del curso 2012-2013 y está libre tras entrenar al Valladolid el curso pasado, al que llevó al 5º puesto.

Con apenas 45 años pertenece a la nueva hornada de entrenadores y en su trayectoria tiene luces como el ascenso a Segunda B con el filial del Espanyol, la promoción con el Girona o la llamada del Barça para formar parte de su cuerpo técnico, con sombras como destituciones prematuras en Sabadell o Ibiza.

Es el tercero que charla cara a cara con el máximo accionista en la sede de su negocio tras Fernando Vázquez y Joan Carrillo (al menos que haya trascendido) si bien se han tanteado otras alternativas vía telefónica sin que ninguna haya convencido hasta el momento.

De Setién y Vázquez no acababa de gustar su fuerte carácter y el control absoluto de la parcela deportiva, así como las difíciles relaciones que tienen con los jugadores en los vestuarios por donde han pasado últimamente. La vía Paunovic también parece cerrarse ya que el serbio tiene ofrecimientos suculentos como el Partizan de Belgrado, mientras que la alternativa de Carrillo sigue sobre la mesa, pero aparcada.

La dilación en la toma de una decisión favorece que Miguel Rivera sea quien se siente en el banquillo el domingo en Montilivi. El preparador malagueño trabaja en las sesiones de la semana para actuar de apagafuegos, aunque asume que el máximo accionista no ha pensado en él como solución a largo plazo. El nuevo técnico se estrenaría en Copa ante el Nástic.

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