Vapuleo periquito a un Almería desconocido

El Almería tenía ante sí una eliminatoria de Copa del Rey ilusionante. Tras un mal final de temporada, en el que se le escapó el sueño del campeonato liguero, los de Ibán Andrés se aferraban a la Copa como el medio que justificara su buena campaña.Sin embargo, lo que pudo ser una tarde para el recuerdo, se convirtió en una pesadilla para los rojiblancos.

Eso sí, el comienzo fue esperanzador. En los primeros veinte minutos los locales tomaron el control de la pelota, pero las ocasiones no llegaban. En el minuto 20 se produjo la primera. El balón le llega a Pablo, que desde la frontal del área, le pega con el interior, y el esférico entra por el palo izquierdo de Lopito que, a pesar de la estirada, nada pudo hacer. Era el 0-1.

Este gol supuso un punto fe inflexión en el encuentro. A pesar de las buenas intenciones locales, los periquitos iban por delante en el marcador. Además, a partir de aquí, el Espanyol iba a dominar en todo momento, mareando y dando un baño a su rival.

En el minuto 22, Caballé dispara desde la línea de tres cuartos, y la pelota rebota en la mano de un futbolista almeriense. Mendez Caballero, sin pensárselo, señaló penalti. Chuli marcó la pena máxima, pero el colegiado mandó repetirla. El delantero visitante hizo el 0-2 en el segundo intento.

Los almerienses estaban viendo como se les estaba yendo el encuentro y la eliminatoria, se desesperaron, y su juego fue cada vez peor. En el 25', Willy, bastante acertado en el día de ayer, pudo hacer el tercero tras una jugada personal, yéndose de tres futbolistas locales. Cuatro minutos después, Pablo se queda sólo en el área, pero la mala suerte hizo que el futbolista visitante se tropezara.

Tanto la defensa, bastante mal ayer, como la velocidad del conjunto blanquizazul hicieron que a estas alturas del partido sólo hubiera un equipo sobre el terreno de juego. En el 34', Pablo pudo hacer el 0-3 en una contra. Éste no tardaría en llegar. En el 36', pared entre Chuli y Gabi, y el protagonista del encuentro ponía tierra de por medio. Un minuto antes, se produjo el primer tiro del Almería, por mediación de Antonio. Antes de que el colegiado pitara el final de la primera mitad, Chuli, otra vez, sentenciaba el partido.

La segunda mitad no tuvo demasiada historia. Los de Ibán Andrés quisieron maquillar el resultado, para llegar con alguna psoibilidad a la vuelta, pero ya era muy difícil. Por su parte, el Espanyol se relajó, fruto de la ventaja que tenía. A pesar de ello, la ventaja visitante pudo ser aún mayor. En el 48', Pepu estrelló el balón al travesaño. Seis minutos más tarde, un potente disparo de Juanmi se fue a la cruzeta. En el 66', Gabi se queda sólo ante Lopito y puede hacer el 0-5. La última ocasión sería en el 82', en la que Heredia pudo hacer el gol de la honra en un disparo de falta.

Con este resultado, los almerienses se quedan prácticamente fuera de la competición copera, el único sueño que les quedaba. El domingo, ambos equipos se volverán a encontrar en el partido vuelta en Sant Adriá de Besos.