Tan blanca como polémica

El Real Madrid tuvo que sufrir para lograr el primer punto de la eliminatoria final por el título de la Liga ACB ante el Barcelona (76-72), con Sergio Llull y Sergio Rodríguez como principales adalides de una empresa que, por momentos, tuvo aspectos épicos.

Tras un gran comienzo en el que el Madrid apretó en defensa y fue incisivo en ataque, Xavi Pascual movió ficha y puso a todos sus poderes en la cancha, incluida una defensa en zona. El 21-14 final fue un poco engañoso, pues Llull consiguió un triple de fortuna en el último segundo.

Los primeros cinco minutos del segundo cuarto fueron claves. El Barça explotó y el Madrid se desangró en un parcial de 2-16, sin que Pablo Laso acertara a cortar esa hemorragia. Los locales se quedaron sin defensa, sin tiro y sin rebote. Con 23-30, el técnico blanco tuvo que devolver a pista a Rudy Fernández y a Llull para plantar cara al Barcelona y a la mejor versión de Víctor Sada, reconvertido en pertinaz anotador con 15 puntos hasta ese momento y 4 de 4 desde la línea de tres. Tras 20 minutos de juego, los azulgrana consiguieron marcharse al vestuario con 10 puntos de ventaja (35-45).

El Real Madrid, poco acostumbrado a ir por debajo en el marcador, se encontró en el tercer cuarto con un Barcelona diseñado para defender a muerte. Minuto 25, 39-49 en el marcador y objetivo cumplido para los catalanes. Felipe Reyes falló una bandeja que pudo haber abierto la puerta de la recuperación, pero que dejó el luminoso en un complicado 50-58 para los madridistas.

Laso puso en pista a los jugadores de raza -Llull, Reyes y Slaughter-, aderezados con la calidad de Chacho Rodríguez y Carroll para intentar recortar. A cinco minutos y medio para el final, la misión estaba más o menos encauzada con el 59-65 y 6 puntos de diferencia. Rudy sustituyó a Llull, potenciando Laso la versión más anotadora de su equipo. El Barcelona comenzó a dar muestras de agotamiento. El alero balear, machacando el aro en contraataque, anotó el empate a 65. Entonces apareció Navarro con cinco tiros libres consecutivos para dar vida a su equipo. Rodríguez colocó el 71-72 a falta de un minuto y Felipe Reyes anotó tras un rebote: 73-72.

A falta de tres segundos, Sada encaró la canasta en busca de la victoria. Una acción embarullada fue interpretada por los árbitros como balón para el Real Madrid. Las protestas le valieron a Navarro una técnica, mientras que los blancos sentencieron su triunfo.