El descenso de Getafe y la absurda sonrisa de M'bami

La todavía corta pero intensa historia de la UD Almería está jalonada por dos momentos particularmente tristes: el 8 de mayo de 2011, cuando se consumó el descenso a Segunda en Getafe y el 23 de mayo de 2015, fecha en la que ocurrió lo propio en casa frente al Valencia. De los dos fue más cruento si cabe el producido a domicilio por el hecho de constituir el primero.

Aquella calurosa tarde de primavera en el Coliseum Alfonso Pérez Roberto Olabe -contratado a la desesperada para intentar salvar los muebles- alineó un once con Esteban, Luna, Pellerano, Carlos García, Míchel, Juanma Ortiz, Corona, Bernardello, Crusat, Goitom y Kalu Uche, saliendo Ortiz, Ulloa y Vargas en la segunda mitad. Un tempranero gol de Adrián Colunga y otro de Pedro León al poco de arrancar la segunda mitad certificaban la pérdida de Primera División para el conjunto rojiblanco en un choque recordado por la absurda sonrisa del camerunés Modeste M'bami, que estaba en la convocatoria y no jugó, captada por las cámaras al término del choque mientras miles de seguidores unionistas lloraban sin consuelo.

Curiosidades del destino, esa tristeza de hace seis años podría convertirse en alegría el domingo en el mismo escenario si se consuma la permanencia ante el conjunto azulón. La empresa no será sencilla por cuanto los locales tienen remotas opciones de ascenso directo y en todo caso se juegan conservar la tercera plaza de cara al play off.

En el banquillo rival habrá un técnico con ascendencia almeriense (la familia de Bordalás remanece de Níjar) y un exrojiblanco, Chuli, en la punta de ataque. Si el Getafe asciende se lo quedará en propiedad, pero nadie entiende que la UDA no incluyera la cláusula del miedo en su contrato de cesión. Y es que con las cosas del comer no se juega.