A Francisco López, presidente de la Asociación Cultural Ferroviaria Virgen de Fátima, se le ilumina la cara cuando habla de la romería ferroviaria. La recuperación de esta tradición le llena de orgullo y por eso, cada año, se esmera aún más para que esta fiesta cale entre los vecinos de Doña María y nunca más vuelva a caer en el olvido.

-¿Desde cuándo lleva participando en la celebración de esta romería ferroviaria?

-Desde hace exactamente doce años, momento en el que la recuperamos. Antes se celebraba en los 50 y 60 pero luego se perdió.

-¿Cómo surgió la idea de recuperar este evento religioso y festivo?

-Hace doce años, un grupo de amigos reunidos en las fiestas patronales del pueblo hablamos de esta fiesta y decidimos echarnos para adelante y recuperarla. La primera fue un poco precipitada debido a que tuvimos poco tiempo. Ese mismo año, en septiembre, nos conformamos como asociación y desde entonces ya es un éxito de participación.

-¿Mantiene aún intacta la ilusión por los preparativos y la celebración de la romería?

-Así es, tengo la ilusión intacta. Ahora que me ha llamado me ha pillado que estaba limpiando el farol ferroviario de la virgen. Esto se hace con mucha ilusión porque si no, no se hace. Yo la viví de pequeño con siete años.

-¿Usted vivió la celebración de la romería antes de su desaparición?

-Sí, con siete años. Y me marcó. Por eso era importante su recuperación.

-Hay veces que el tren para cuando pasa por la estación de Doña María. ¿Sucederá este año?

-Así es. Muchos años vienen romeros de Granada y de forma extraordinaria el tren para y se bajan aquí. Este año no va a poder ser porque la mayoría tienen comuniones. Aún así, el tren, como todos los años, reducirá su velocidad y pitará a su paso por la estación. Es su manera de honrar a la Virgen de Fátima.

-Cada año viene más gente. La romería gusta.

-Así es. El Ayuntamiento de Las Tres Villas ha preparado una paella para 500 personas. El boca a boca ayuda mucho. Hay gente que vino un año y ya son fieles y repiten todos los años. Eso para mí es un orgullo. Vienen muchos exferroviarios y gente ligada al ferrocarril. Y los que no pueden venir porque muchos son mayores me llaman. El otro día me llamaba una mujer de Jerez de la Frontera que me contaba que sentía mucha pena por no poder venir pero que su marido tiene ya 88 años y estaba ya muy mayor.

-¿Está asegurada la permanencia en el tiempo de este evento? ¿están involucrados los jóvenes?

-La juventud viene pisando fuerte. Son muchos los jóvenes que participan activamente en la celebración y la preparación de la romería. En ese sentido estoy tranquilo porque no va a suceder como en el pasado. Actualmente somos 114 socios y todos tenemos ganas de trabajar por esta celebración.

-¿Qué mensaje le gustaría transmitirle a los almerienses que no conocen esta tradición?

-Que vengan y disfruten con nosotros mañana (por hoy). Si lo hacen van a quedar encantados del ambiente de cordialidad y familiaridad. Y seguro que el año que viene repiten.