Un mensaje de tranquilidad

El presidente del Poli Ejido, Gabriel Hidalgo, lanzó un mensaje de tranquilidad a través de los micrófonos de Onda Cero a raíz de la inquietud en la plantilla a causa de la deuda que aún no ha cobrado de la pasada campaña y en la afición celeste ante la ausencia de movimiento en la entidad para encarar la próxima temporada.

El consejo de administración del Poli Ejido tiene hasta el 31 de julio para solventar las deudas contraídas con los jugadores si no quiere verse en el descenso de categoría. Si se consumara este medida extrema, el futuro del conjunto ejidense sería incierto por la gravedad de los problemas económicos que atraviesa.

Pero el presidente ejidense no hace aspavientos ante la difícil situación y asume que el club deba acatar las condiciones impuestas para mantenerse la próxima temporada en Segunda B. "Es normal que si no se hacen efectivos los pagos, lo lógico es que tengamos sanciones económicas", apuntó.

Los jugadores del conjunto celeste denunciarán su situación de impagados ante la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) a lo largo de este mes -siempre antes del plazo fijado, el día 30-. Sin embargo, el club tiene una prórroga de un mes más para subsanar sus deudas con los futbolistas, por lo que el máximo dirigente celeste no contempla el descenso del equipo a Tercera como una posibilidad real. "No es nuestro caso. Tenemos hasta el 31 de julio para pagar. No se va a consumar la desaparición del Poli Ejido", manifestó. Los problemas económicos que azotan a la entidad ejidense se deben, en parte, a la falta de ingresos de las empresas que su día se comprometieron a apoyar al Poli Ejido. A causa de esto, el presidente no escondió que el club atraviesa "una situación difícil". Además, Hidalgo subrayó que "se debe el dinero que algunas compañías no nos han abonado. Somos conscientes de la deuda del club". Pero la intención de del Poli Ejido es solventar esta situación, incómoda para la plantilla y para el propio club, lo antes posible: "Intentaremos por todos los medios hacer efectivos los pagos". Así, el presidente quiso trasmitir un mensaje de tranquilidad porque "el año que viene estaremos en Segunda B". Además, serenó los ánimos que rodean al equipo y aseguró que "una sociedad anónima deportiva tiene muchas cosas antes de una desaparición". El club intentará buscar todos los medios necesarios para pagar a sus jugadores: "Cualquier empresa tiene medidas de emplazamiento".

Además del plazo legal para no descender, el club no puede demorarse en solucionar estos problemas económicos para centrarse en preparar la próxima temporada, algo que también preocupa a la afición celeste.