La Unión Europea aplaza de nuevo la votación de la oficialidad del catalán
Varios países mantienen sus dudas sobre el proyecto, que forma parte del acuerdo del PSOE con Junts para investir a Pedro Sánchez
España pide a sus socios en la UE "no secuestrar o retrasar innecesariamente" su incorporación
La votación sobre la oficialidad del catalán, el euskera y el gallego en la Unión Europea se ha vuelto a posponer este viernes ante la falta de consenso entre los países miembros. En la reunión de los ministros de este viernes en Bruselas ha vuelto a quedar patente que varios estados mantienen dudas sobre el proyecto planteado por el Gobierno y que forma parte del compromiso que adquirió el PSOE con Junts para la investidura de Pedro Sánchez como jefe del Ejecutivo.
El secretario de Estado español de la Unión Europea, Fernando Sampedro, pidió a sus socios europeos "no secuestrar o retrasar" la decisión sobre la oficialidad del catalán, el euskera y el gallego. "Lo que no puede ser es secuestrar o retrasar los debates innecesariamente", dijo Sampedro en declaraciones a la prensa, antes del Consejo de Asuntos Generales que se celebra en Bruselas.
La propuesta española "no tiene ningún impacto negativo para ningún Estado miembro. Por lo tanto, consideramos que debe ser posible aprobarlo a la (mayor) brevedad" posible, añadió Sampedro.
El secretario de Estado aseguró que el Gobierno "ha abordado todas las dudas" políticas, económicas y jurídicas que han manifestado los países de la UE desde que la oficialidad de las lenguas se discutió por primera vez en septiembre de 2023, bajo la presidencia española de la UE.
En este sentido, Sampedro dijo que "está claro que no se necesita una revisión de los tratados" europeos, como opinan los servicios jurídicos del Consejo de la UE.
"Los tratados son muy claros, los tratados dicen que la identidad nacional de los estados miembros, en este caso la identidad nacional plurilingüe, nuestro sistema constitucional debe ser respetado", por lo que "se trata de terminar con una discriminación".
"Veinte millones de europeos no pueden ser discriminados porque las lenguas que son oficiales en los territorios españoles en los que residen no se traten exactamente igual que las lenguas que son oficiales en otros países", afirmó Sampedro, quien también reiteró que España está dispuesta a asumir el coste de la propuesta.
El ministro de Exteriores de Luxemburgo, en cambio, aseguró que "realmente no es el momento adecuado" de aprobar la oficialidad del catalán, el euskera y el gallego, cuando los Veintisiete han aprobado hoy, tras varias semanas de discusiones, un nuevo paquete de sanciones a Rusia y cuando sigue sin haber unanimidad sobre el conflicto en Oriente Medio.
"Hemos necesitado días para acordar las sanciones (a Rusia), todavía no somos capaces de tener decisiones sobre Israel y tener un alto el fuego en Palestina, ¿pero aprobamos el gallego, el euskera y el catalán?", preguntó retóricamente Bettel.
"Si al final del día la gente se pregunta hacia dónde va Europa, esta es la cuestión", continuó.
En la misma línea, el ministro de Asuntos Europeos de Polonia, Adam Szlapka, apuntó que "muchos estados miembros necesitan más tiempo porque hay dudas, especialmente jurídicas", en las que también insistieron Francia, Finlandia y Austria.
España sí cuenta con el respaldo de Bélgica, Dinamarca, Eslovenia, Hungría, Irlanda, Lituania, Rumanía y Portugal.
También te puede interesar