Los Morancos, incombustibles

La 'Risoterapia', ofrecida por los hermanos Jorge y César Cadaval, llenó de risas, diversión y humor la noche del miércoles · Más de dos horas de comedia en las que intervinieron, entre otros, 'Antonio y Omaíta'

José A. García / Almería

24 de agosto 2012 - 09:08

Lleno absoluto presentó la Plaza Vieja, punto neurálgico de la capital, el pasado miércoles para disfrutar del espectáculo cómico de los hermanos Cadaval, más conocidos como 'Los Morancos'.

Entre el público presente, distintas autoridades políticas de la ciudad no quisieron perderse el show de rositerapia de Los Morancos. Además, familiares de los propios humoristas de Sevilla y los padres del cantante local, David Bisbal, no faltaron a la cita.

A las 22:20 aproximadamente comenzó Risoterapia, con los humoristas andaluces vestidos de médicos. En esta primera actuación, César Cadaval hizo de médico de pago y Jorge de médico de la Seguridad Social.

Los Morancos levantaron las primeras carcajadas y aplausos con su sketch sobre los catalanes y su tacañería o las meteduras de pata del PSOE y PP. Además, esta primera parte del show tuvo otros momentos de risa y humor como "los inmigrantes que invaden España, especialmente del Este", en la que Jorge se mofó con los rumanos, principalmente, ya que el "otro día estuve en Rumanía y no había nadie, puesto que estaban todos en España".

Además, hicieron un guió con su toque humorístico a la actual crisis que azota España. "Los niños antes hacían la comunión de marineros, ahora lo hacen de náufragos".

La segunda parte del espectáculo estuvo protagonizada por las situaciones cotidianas del día a día de los ciudadanos. "Yo soy un tío macho. Yo sé cuando se va a correr mi mujer y todo, fíjate. Cuando la veo que se pone el chandal y los tenis, sé que se va a correr", fue alguno de los chistes que contaron los hermanos sevillanos la noche del miércoles.

Durante el espectáculo tampoco faltaron personajes como La Duquesa de Alba con su mayordomo, interpretado por Paco Lola y, como no, las incombustibles Antonia y Omaíta, que produjeron las carcajadas del público almeriense allí presente.

Luego fue el turno de César Cadaval que deleitó al público con un sketch sobre los chinos y los establecimientos de éstos.

Por último, los dos humoristas, ya vestidos de traje, recitaron una canción dedicada a Almería y concluyeron el espectáculo pasadas las 00:30 horas con un monólogo sobre la familia, la suegra y la homosexualidad.

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