Agroiris, Unica y Femago negocian un acuerdo de comercialización conjunto

El campo almeriense se mueve. La gran asignatura pendiente que el sector lleva arrastrando desde sus orígenes, desde el enarenado hasta lo que es hoy, la unión de la agricultura para comercializar mejor las frutas y hortalizas que produce, con mejores rendimientos que garanticen la supervivencia y ofrezcan unos márgenes dignos para los agricultores, ganando en competitividad, cada día está más cerca.

En plena fase de transición entre campañas hortofrutícolas, la correspondiente a 2011-2012, que está dando sus últimos coletazos, y la que está a punto de comenzar, la 2012-2013, las grandes compañías comercializadoras de frutas y hortalizas 'made in Almería' están moviendo ficha para ganar peso específico ante sus compradores internacionales y la gran distribución a la hora de negociar las condiciones de compraventa y, sobre todo, los precios.

Según ha conocido Diario de Almería, tres gigantes hortofrutícolas de la provincia que se encuentran inmersos en plena negociación para la comercialización conjunta de frutas y hortalizas son la SAT Agroiris, la cooperativa de segundo grado Unica Group y el Grupo Femago, que tienen la vista puesta, sobre todo, en pimiento y pepino. Entre las tres suman más de 400 millones de kilos de producto comercializado, lo que supone más de la décima parte de la producción total de la provincia de Almería, una cifra que da idea de la importancia y el calado de esta operación, que debe servir de ejemplo para el resto de operadores del sector a la hora de hacer negocios y apostar de verdad por el futuro, dejando a un lado los personalismos.

No se trata de unir estructuras, algo que suele suponer demasiado peso burocrático, con la dificultad añadida de aunar modelos de gestión (cooperativas-alhóndigas). No es necesario, ni mucho menos, fusionarse, es un movimiento que organiza la oferta y mejora las condiciones a la hora de vender el producto. Las sinergias de esta operación a tres bandas buscan un acuerdo que permita afrontar con mayores garantías la negociación de contratos con grandes firmas internacionales, un proyecto estratégico ante el que el campo ha de quitarse el sombrero y debe dar ejemplo para que otros sigan este acertado camino. Estas tres entidades poseen una facturación conjunta de más de 450 millones de euros.