Bisnieto, nieto e hijo de agricultores
El personaje
Vargas no es una persona conformista. Lo demuestra cada vez que sale a la calle para manifestarse con el resto de compañeros del gremio. Por eso disiente de aquellos empresarios agrícolas que afirman que la crisis no está tocando a la agricultura tanto como a otros sectores debido a que se trata de un área de primera necesidad. "Rotundamente no estoy de acuerdo", asevera.
"Si bien es cierto que producimos alimentos no deja de ser menos cierto que las familias de Europa no compran con la misma alegría de hace unos meses. En algunos casos sólo se compran artículos como pan, leche, algunas legumbres y poco más", aduce. "Tampoco podemos olvidar la escalada de precios que han tenido los suministros. Y por si todo esto fuese poco, la distribución cada día da más preferencia a productos de otros países donde sus márgenes comerciales son mayores y compiten directamente contra nosotros".
La satisfacción de trabajar en defensa de los demás, en este caso de los agricultores, es el motor que lo mueve en su día a día laboral. Como él mismo admite, su cargo como presidente de Asaja es lo que más le llena, junto con el hecho de poder tener su propia explotación agrícola. "Eso se lo tengo que agradecer a mi familia que fue la que aposto por mí y puso la primera piedra", reconoce.
"Ser hijo de agricultores, nieto, bisnieto y estar orgulloso de serlo" fue lo más importante a la hora de elegir dedicarse al mundo de la agricultura. Vargas tiene claro quién es, cuáles son sus raíces y hacia dónde quiere ir. "Aún no es el momento de dejar la organización, pero no me veo toda la vida en esto".
Le quedan muchas cosas por hacer antes de que llegue ese momento. Una de ellas es abrir nuevas oficinas de Asaja en El Ejido, Adra, Los Vélez, La Alpujarra y Alto Almanzora. La otra, posicionar a Asaja en Almería como la única asociación representativa de la empresa familiar agraria "con total y absoluta independencia política".
"Nuestro objetivo esta bien claro. Nos debemos a los intereses de nuestros socios a los que representamos, aunque reconozco que a veces es difícil contentarlos a todos".
Las movilizaciones que ha presidido Vargas en los últimos días van justo en esa línea de buscar el bien común para la mayoría.
"Reivindicaremos por precios justos hasta el día en que nos salgan las cuentas", asegura. Ese día llegará "ni más ni menos que cuando nos quede una renta digna para poder vivir y que sea representativa del número de personas de la familia que trabaja en la explotación, del cargo que ocupan y del riesgo que corren".
También te puede interesar
Lo último