Bodega Sánchez Ferrer abre con un maridaje de vino y arte

El gran sueño de Luis Sánchez Ferrer se hizo realidad hace justo una semana. El secretario del Ayuntamiento de Fiñana y ahora también empresario inauguró su bodega de forma oficial en La Calahorra (Granada), su municipio de residencia, y comenzó así una actividad comercial que da continuidad a una de sus mayores pasiones, la viticultura.

Unas 200 personas asistieron al evento que se alargó hasta altas horas de la madrugada. Y es que al buen vino se sumaron otros condicionantes como la buena música y el arte, de la mano del trompetista internacional Julián Sánchez y Grup, el cantaor Antonio Gómez 'El Colorao' y la guitarra de José María Ortiz y los trazos de las pinturas de la Escuela deMaría Rosa Sánchez Salmerón, de Guadix.

Entre los presentes estuvieron el delegado de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente en Almería José Manuel Ortiz Bono y su homóloga granadina Sandra García, el delegado almeriense de Salud y Bienestar Social Alfredo Valdivia, el presidente del consejo territorial del Grupo de Desarrollo Rural de Almería y alcalde de Abla, Antonio Ortiz Oliva, o el gerente de la Asociación para el Desarrollo Rural de la Comarca de Guadix, Juanjo Manrique.

El vino de Sánchez Ferrer, cuya marca es 'En una palabra...', despertó interés en los allí presentes y auguró la buena marcha de la bodega. Y es que los caldos allí presentes son una pequeña muestra de las novedades que están por llegar. "Para este invierno vamos a empezar a comercializar un vino de maceración carbónica muy interesante con Denominación de Origen Protegida Vinos de Calidad de Granada y otro muy similar pero sin la denominación, ya que la uva se recogió antes de contar con el sello", explica el bodeguero.

Sánchez Ferrer está satisfecho con esta primera toma de contacto con el público y prepara novedades para completar la oferta de sus instalaciones en los próximos meses. "Vamos a hacer visitas a la bodega y degustaciones, además de cursos en un Aula Permanente de Cata". Además de aprender a saborear y calificar los caldos, los asistentes podrán adquirir conocimientos de maridaje de distintos vinos con productos gastronómicos.

Aunque aún se están perfilando las diferentes actividades formativas, el propietario de la bodega adelanta que habrá cursos exprés de una a dos horas y otros más largos de dos o tres fines de semana en los que se podrá entrar más profundamente en materia.

Entre las novedades está por llegar, además, el desarrollo del diseño de la imagen comercial y el etiquetado.