El pasado 20 de julio se hacía público a través del Boletín Oficial del Registro Mercantil (BORME) la ampliación de capital de la inmobiliaria creada por Cajamar para gestionar y poner en el mercado los inmuebles 'heredados' de la crisis, un pesado lastre para las anotaciones contables, por el elevado número de unidades en cartera.

Este movimiento supuso una inyección económica de nada menos que 44 millones de euros. Fue el germen de la operación que ha visto la luz unas semanas después y que ha supuesto la fusión por absorción por parte de Cimenta2 Gestión e Inversiones, la inmobiliaria de Cajamar, al Grupo Inmobiliario Aguamar.

Precisamente, ese mismo día, el 20 de julio de 2010, también se depositaron los proyectos de fusión por absorción en el BORME, que, a la postre, han culminado con éxito, cuando volvió a ver la luz el pasado 5 de agosto, a través del registro mercantil.

Se cerraba así una operación con la que Cajamar suma el 75% del capital restante del Grupo Inmobiliario Aguamar a su cartera empresarial, en la que ya contaba con el 25% de la compañía.

Aguamar cuenta con una experiencia de 14 años en el sector inmobiliario, pues surgió en 1996, periodo en el que ha puesto en el mercado más de 1.100 viviendas. Además, el Grupo Inmobiliario Aguamar es propietario de Envía Hotel Wellness & Golf, el primer establecimiento de cinco estrellas abierto en Almería, y participa en Apartamentos Media Luna (Roquetas de Mar) y Country Club La Envía Golf, la entidad que gestiona el campo de golf que hay junto al hotel, de 18 hoyos y casi 6.000 metros cuadrados de superficie. El otro hotel de la inmobiliaria es Playa Luna, en Roquetas de Mar, que ronda las 500 habitaciones y que se encuentra en régimen de alquiler, gestionado por la cadena de José María Rossell, Hoteles Playa.

Aguamar cuenta con un total de 600 habitaciones de hotel, 20.000 metros cuadrados de locales comerciales y la posibilidad de desarrollar un total de 800.000 metros cuadrados de techo para proyectos inmobiliarios.

Además, ya tiene en marcha nada menos que una quincena de promociones, que supondrán la construcción de alrededor de 900 viviendas, con una superficie conjunta de 90.000 metros cuadrados, con proyectos en la provincia almeriense y en Segovia (El Espinar).

A ello hay que añadir el parque empresarial de Aguamar, Aguamar Business, ubicado en la zona norte de Roquetas de Mar, junto a la Autovía del Mediterráneo, y que dispone de algo más de 3.500 metros cuadrados repartidos en cinco plantas, una planta baja y entreplanta dedicadas a local comercial, y un amplio espacio para oficinas, ofreciendo la posibilidad de agrupar o dividir módulos, en función de las necesidades del comprador.

El edificio también posee dos plantas sótano, con capacidad para 102 plazas de aparcamiento. Unas instalaciones modernas, dotadas de las últimas tecnologías, cuyas oficinas se están comercializando para albergar empresas, pues la crisis económica de los últimos dos años ha provocado que los espacios no hayan tenido la demanda esperada, para lo que ofrecen una posición geográfica privilegiada, junto al parque comercial Viapark Bahía de Almería, el Palacio de Congresos y Exposiciones de la Cámara de Comercio, una zona demográfica compuesta por la suma de Aguadulce, Roquetas y Vícar, además de las sinergias propias de contar en sus cercanías con locales comerciales de marcas como Porcelanosa.

La absorción por Cimenta2 del Grupo Inmobiliario Aguamar conlleva, además, el ensamblaje de toda la maquinaria interna de unos y de otros. Cimenta2 se nutre así de los recursos humanos de Aguamar, a la vez que suma a sus más de 1.000 inmuebles en cartera los correspondientes a la inmobiliaria almeriense, que dispone de viviendas en la provincia, así como en la capital española.

Dentro de este proceso, ya se han producido varios movimientos, tales como el fichaje, a mediados de julio, de Francisco Manuel Martínez Valverde como director general de Cimenta2, sustituyendo al anterior, Ángel Pisa, que ha pasado a hacerse cargo de la Dirección Comercial.