La fusión entre Cajamar y Ruralcaja, a la espera de la reunión de cajas en Madrid

A lo largo de este jueves, se despejarán las incógnitas. Ese día, la Asociación Española de Cajas Rurales (a la que no pertenece Cajamar) acogerá una reunión de su junta directiva para abordar la propuesta que realizó el pasado 2 de noviembre el presidente de Ruralcaja y del grupo Cajas Rurales del Mediterráneo (CRM), Eduardo Ferrer, en la que instaba, a través de una carta a esta asociación, a la unión de todas ellas bajo la cabecera del Banco Cooperativo Español, en un intento por recabar efectivos para su SIP (Sistema Institucional de Protección), que ahora está compuesto por 15 entidades.

Si la mayoría de las cajas rurales optan por el no a esta opción, se abriría el proceso hacia la fusión entre este grupo valenciano, el segundo más fuerte del sector de cajas rurales por volumen de negocio, tras el de Cajamar, líder nacional desde 1984, con la rural almeriense. Ello supondría el inicio formal de conversaciones, pues fuentes del sector reconocen contactos informales, mientras que desde la entidad almeriense siguen negando la existencia de conversaciones formales, más allá de planteamientos y escenarios teóricos.

De ser así, antes de que acabe el año, Cajamar llevaría la propuesta de fusión a análisis por parte de su Consejo Rector, que en un plazo de menos de tres meses, fijaría una asamblea con un orden del día en el que debería explicar a los socios el proyecto para fusionarse con Ruralcaja, como principal punto del orden del día.

La operación conllevaría, como consecuencia, la integración de todas las cajas rurales que componen ambos SIP, las quince que lidera la valenciana, y las seis que capitanea la almeriense, con lo que el resultado final de esta unión daría una entidad con unos activos de alrededor de 40.000 millones de euros, una cifra muy cercana a la que maneja Ibercaja (45.000). En la actualidad, Cajamar ocupa la posición número 15 en el ranking nacional por volumen de negocio, según fuentes del Banco de España, que mejorará con las futuras fusiones de entidades que tiene por delante.

Salga o no esta operación, lo que está claro es que el proceso de integración de las rurales es imparable y habrá más movimientos en 2012; el objetivo deseable por el Banco de España es que haya un solo grupo. Y de ser así, el líder será Cajamar.