Gómez Navarro propone un paquete de medidas para salir reforzados de la crisis

El presidente de las Cámaras de Comercio de España culpa al Gobierno de no haber hecho un diagnóstico · "No se reconoció a tiempo y se dijo que teníamos el mejor sistema financiero"

Más de 300 personas asistieron ayer al Foro de Debate de las Ideas de la UAL.
Más de 300 personas asistieron ayer al Foro de Debate de las Ideas de la UAL.
Elio Sancho / Almería

03 de marzo 2010 - 01:00

Hoy en día, no es fácil encontrar a alguien cualificado y con suficiente valentía para hablar de la situación económica real. De los porqués de haber entrado en esta crisis galopante y, sobre todo, poner sobre el tapete un paquete de medidas para afrontarla e intentar salir del atolladero. El mérito es aún mayor cuando la persona que lanza el mensaje se considera "socialista" y ha pertenecido recientemente al Ejecutivo en el poder, al frente, nada menos, que del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo.

Ayer lo hizo Javier Gómez Navarro, presidente del Consejo Superior de Cámaras de Comercio y ex ministro, en la inauguración de la segunda edición del Foro de Debate de las Ideas de la Universidad de Almería. Con una conferencia magistral, Gómez Navarro avisó de que no iba a regalarle los oídos a nadie, en referencia a su pasado en el Gobierno, y aprovechó para darle algún que otro tirón de orejas.

Parafraseando a Kennedy, afirmó que es "momento de pensar qué puedo hacer yo por mi país, no qué puede hacer mi país por mí", en referencia a la iniciativa www.estosololoarreglamosentretodos.org, impulsada desde las Cámaras de Comercio, bajo su sello personal, basado en el optimismo, la unidad de acción y el trabajo.

Presentado por el presidente de la Corporación Tecnológica de Andalucía, el almeriense Joaquín Moya-Angeler, amigo confeso suyo, Gómez Navarro recordó que la situación económica de España era insostenible y que se hubiese entrado igualmente en ella, aunque no se hubiera producido la crisis financiera internacional que todo el mundo utiliza como génesis también de la posterior caída del modelo español.

El presidente de las Cámaras de Comercio enumeró la burbuja inmobiliaria y el crédito relacionado con ella, la vivienda, como "elemento no para vivir, sino con el que especular", además del déficit de la balanza por cuenta corriente de un 10%, pues "hemos gastado un 10% más de lo que producíamos", como factores inevitables para entrar en la crisis, con o sin hipotecas subprime. "Nos veíamos ricos y para siempre", resumió.

La realidad de la crisis, explicó, son los más de 900.000 millones de euros que la banca internacional le había prestado a la española, de los que casi 400.000 millones se habían destinado a financiar al sector inmobiliario. "Cuando estalla la crisis internacional, se colapsa el sistema financiero español", continuó. Pero como los pisos "siguen sin venderse", aún hay más de 350.000 millones de euros que las inmobiliarias deben a los bancos, de los que más de 100.000 millones se traducirán en pérdidas, mientras que el resto lo recuperarán cuando vendan los pisos, apuntó.

Consecuencia: el cierre del grifo a los créditos. Gómez Navarro recordó que Estados Unidos bajó un 30% el precio de los pisos, pero dijo que si se hiciera aquí, quebrarían las inmobiliarias y después, los bancos, que lo que están haciendo es "ganar tiempo" provisionando fondos para esas futuras pérdidas.

Aquí es donde entró a valorar la actuación del Gobierno ante esta situación, al que culpó de no haber hecho bien el diagnóstico con la suficiente premura y planificación. Al contrario del modelo inglés o el americano, "aquí no se reconoció el problema y se dijo que teníamos el mejor sistema financiero del mundo".

Para comenzar a remontar el vuelo, enumeró un paquete de medidas destinadas a "favorecer el aumento de la competitividad". Comenzó con el modelo de financiación de la Seguridad Social, del que dijo que es "infinanciable" sólo con "los impuestos sobre el trabajo", en referencia a las cuotas, y abogó por su mantenimiento mediante "impuestos sobre el consumo, como el IVA y otros que se creen". A su juicio sería más equitativo, "lo pagaríamos entre todos, incluso cuando compramos productos chinos o filipinos". En esta línea, pidió una bajada de cuotas a la Seguridad Social, como la instaurada por Angela Merkel en Alemania, sin llegar al "modelo danés", que se financia al 100%, pero sí reduciendo estos "impuestos sobre el trabajo". También en el campo fiscal, apostó por reducir el impuesto de sociedades sobre los beneficios no distribuidos, para incentivar la reinversión en la mejora de las compañías.

También abogó por la reforma del mercado de trabajo, pero hizo hincapié en que no pide el abaratamiento del despido, sino en reducir el coste de la creación de empleo. A su juicio, "la CEOE se equivocó al ponerlo como primer tema para abordar con los sindicatos".

Ligado al mercado laboral, recordó el problema de la economía sumergida, que destruirá a "todas aquellas empresas que compiten legalmente" contra aquellos que no lo hacen y la cifró en torno a un 20% en España. Y también apuntó al absentismo, que en España fue del 8% en el año del boom inmobiliario, en 2007. "La crisis ha mejorado la salud de los ciudadanos porque ha bajado un 2% el absentismo", dijo, y recordó que Delphi se fue de Cádiz porque el absentismo llegó a tasas de hasta el 20%.

Asimismo, abogó por mejorar los ratios de movilidad geográfica, muy lejos de los que hay en el contexto internacional, quizá por factores como la familia o la estructura de la vivienda en propiedad.

"Hay que ligar los salarios a la productividad", explicó. En la actualidad, los aumentos salariales están relacionados con el nivel de vida y con la antigüedad, "algo que no tiene lógica, pues, por qué un señor que trabaja más y mejor, cobra menos por llevar menos tiempo en la empresa que otro con más antigüedad y menos productivo", apuntó, señalando que esto es demasiado frecuente en el sistema público.

Javier Gómez Navarro solicitó la reforma del sistema educativo: "En España somos buenos transmisores de conocimientos, pero no de habilidades". Según él, deben reforzarse materias como las nuevas tecnologías y sus aplicaciones, los idiomas, hablar en público, trabajar en equipo, el liderazgo o la toma de decisiones. También recordó que se ha primado la educación universitaria por encima de la formación profesional, sin mirar la demanda del mercado.

Relacionado con el sistema educativo, también solicitó reformas para la formación continua. "En España se han dedicado miles de millones y ningún estudio ha dicho que hayan servido para mejorar la productividad, por lo que hemos estado tirando el dinero".

stats