Almería no faltará a la gran manifestación del mundo rural que se celebrará en Madrid el 20 de marzo. Según las previsiones de la organización se estima que unos 50 autobuses partirán desde la provincia almeriense a la capital de España, además de los vehículos individuales que emprendan el viaje.

Los elevados costes y la competencia desleal de terceros países son algunos de los argumentos que sustentan la presencia de Cooperativas Agro-Alimentarias, como señala su presidente en Almería, Juan Antonio González: “En Almería producimos productos de calidad que hemos garantizado en momentos decisivos como la pandemia y actualmente en el contexto de la invasión a Ucrania”, dice González quien reivindica un pago justo por los mismos.

Para Andrés Góngora, secretario provincial y responsable estatal de Frutas y Hortalizas de Coag, dentro de la tabla reivindicativa que se llevará a Madrid en defensa del mundo rural destaca la importancia de la soberanía alimentaria y preferencia comunitaria, dos ejes de la Política Agraria Común, “sin embargo se está llevando al campo a una situación agónica en el que se han desmantelado todos los procesos de regulación de los mercados, abriendo a las importaciones de terceros países desprotegiendo al sector. Estamos a tiempo de pararlo, pero o se protege o se condena al sector”. En este sentido, Góngora insiste en que España se tiene que replantear sus exigencias en la Unión Europea: “Hace dos décadas decían muchos representantes políticos que los sectores agrarios eran innecesarios y que las economías se tenían que basar en la tecnología y aspectos sofisticados mientras la alimentación sería cosa de terceros países, y las pruebas son que ante un envite como la pandemia o la invasión de Rusia a Ucrania nos ponen ante las cuerdas. Por tanto, hace falta un cambio en las políticas de la UE y se proteja a agricultores y ganaderos para poder abastecer a la población europea de alimentos. Nuestro mercado es el europeo y lo reivindicamos”.

El responsable de Coag Almería también muestra su preocupación por decisiones comunitarias que se están adoptando en el contexto de guerra respecto a la rebaja de exigencias a las importaciones de terceros países, “la invasión de Ucrania no puede ser un argumento para rebajar las exigencias. Ayer nos encontrábamos cómo la UE rebajaba las exigencias de calidad en materia fitosanitaria al maíz procedente de Argentina para alimentar a nuestros animales. Estamos en un momento excepcional pero no puede ser la tónica dominante”.

Antonio Navarro, presidente de Asaja Almería, por su parte exige responsabilidad al Gobierno “que no aporta soluciones y hace oídos sordos a las peticiones del sector que también salía a la calle en octubre. Estamos ante la campaña más cara de la historia y lo decíamos hace unos meses y, hoy, estamos por encima de todo aquello”. De acuerdo a las palabras de Navarro, se requiere un plan de choque que posibilite el día a día de agricultores y ganaderos y que soportan cada día un mayor incremento de costes en energía, agua, fertilizantes y plásticos, entre otros. Como ejemplo, Navarro apunta a que el kilo de plástico de cubierta de invernadero llega ya casi a los 5 euros. “Pedimos que se haga como en otros países como Francia que a los agricultores y ganaderos les están quitando los impuestos a carburantes. ¿Por qué aquí no se puede hacer? Estamos pagando más del 50% de la factura de carburantes y otros nada más que de impuestos”. Por último, Navarro también mira a las importaciones de terceros países y la tolerancia europea.

Francisca Iglesias, secretaria provincial de UPA Almería, alerta sobre la especulación con la falta de alimentos para el ganado, en este sentido apunta a que el kilo de pienso mezcla para el ganado ha subido un 50%, de los 40 céntimos a los 60 desde final de euro. Según Iglesias en España hay stock de cereal por lo que pide que se libere al igual que deje de emplearse para biodiésel y se emplee para alimentación. “Que no cunda el pánico, que los ganaderos esperen porque el precio bajará con las importaciones de otros países como Estados Unidos, Argentina y previsiblemente Canadá”. Por otro lado, la responsable de UPA pide una tarifa social para el sector agrícola y ganadero, asimismo que se elimine, como se hizo en 2001, el impuesto al hidrocarburo, entre otras medidas.

José Antonio Fernández, portavoz de la Mesa del Agua de Almería, traslada la petición sobre la garantía de recursos hídricos, que se acometan las infraestructuras necesarias de regadío y que el precio del agua desalada se establezca en 30 céntimos el metro cúbico. “Ahorrar más agua por parte de un regante de Almería es casi imposible. Por lo tanto, si nuestro ahorro es máximo y no garantizamos el agua las cooperativas y agricultores estamos de más en este campo español. Es necesario que se garanticen los 180 hectómetros cúbicos de agua desalada en la provincia de Almería".

Respecto a la factura eléctrica, desde las cooperativas manifiestan que han doblado su factura desde el inicio de campaña, mientras los regantes, que en su mayoría están en el mercado eléctrico diario, han multiplicado los 50 euros que rondaba el megavatio por seis o siete veces, según Fernández, quien añade que los que han cerrado contratos anuales lo han hecho por unos 200 euros.

Los organizadores de la manifestación del mundo rural que se celebrará en Madrid el próximo 20 de marzo, (Asaja, Coag, UPA, Real Federación Española de Caza (RFEC), Oficina Nacional de la Caza (ONC), Alianza Rural, Unión de Criadores del Toro de Lidia (UCTL), Federación Nacional de Comunidades de Regantes de España (FENACORE) y Cooperativas Agro-alimentarias), prevén la asistencia de más de 200.000 personas en lo que se presenta como una cita histórica para reivindicar un futuro para el mundo rural y las actividades que lo sustentan.