Murgiverde, agricultura a lo grande

Murgiverde SCA es la única cooperativa de segundo grado que existe actualmente en el sector hortícola almeriense. Nació el uno de septiembre de 2005 de la fusión entre Ejidoverde y Agromurgi, dos empresas que hace más de tres años apostaron decididamente por unir sus fuerzas ante el gigante de la gran distribución y servir así de ejemplo al resto de la agricultura intensiva de la provincia.

El catálogo de productos de esta empresa está fundamentalmente centrado en pimiento y pepino, aunque el calabacín, la berenjena y el tomate forman parte de la oferta hortícola junto con el melón y la sandía para la campaña de primavera. El funcionamiento de la cooperativa es ejemplar, lo que ha favorecido su posicionamiento en los mercados. Según Manuel Galdeano, presidente de Murgiverde y máximo responsable de Coexphal, "los clientes están muy contentos con nuestra forma de trabajar y los agricultores socios también apuestan por la línea que lleva Murgiverde. Es la única cooperativa de segundo grado que hay en Almería. La idea que teníamos al constituir una cooperativa de segundo grado fue pensando en el futuro, ya que así se puedan adherir e integrar más empresas, con lo que se configuraría un grupo potente y más grande".

Murgiverde además de ser una empresa pionera y en pleno crecimiento, también ha decidido involucrar a sus agricultores en la puesta en marcha de la lucha integrada y el control biológico. De las 800 hectáreas de superficie con las que cuenta, más de un 80%, es decir 650 hectáreas se cultivan desde la pasada campaña con la utilización de insectos auxiliares contra las plagas, evitando el uso de productos fitosanitarios. "La implantación del control biológico ha sido muy rápida. Nosotros fuimos de los primeros en empezar con un volumen razonable y ya la pasada campaña tuvimos aproximadamente 650 hectáreas bajo control biológico, lo que representa un porcentaje muy alto. Espero que en poco tiempo lleguemos al 100%. Ahora mismo los únicos productos que no están al 100% en control integrado son el pepino y el tomate debido a que su implantación es un poco más complicada".

Para Galdeano, la respuesta de los agricultores en la implantación del control biológico ha sido "muy favorable, algunos entraron porque era obligatorio pero cuando comprobaron las ventajas de esta técnica ya es imposible hablarle de fitosanitarios. Ahora han comprobado que funciona mejor que los químicos y aporta mayor bienestar tanto para el propio productor como para todos los trabajadores que hay en el invernadero". Desde el punto de vista comercial los productos cultivados con lucha integrada "tienen una ventaja grandísima porque contamos con la seguridad de que no vamos a tener ningún problema por fitosanitarios y para los mercados los productos tienen una buena calidad".

Europa centra las ventas de Murgiverde. Dentro del viejo continente y por este orden se encuentran Alemania, Países Nórdicos, Francia, Inglaterra, Suiza, Holanda y Bélgica. En la conquista de nuevos destinos para los productos, Murgiverde ha sido una de las pocas empresas que comenzó a exportar a Estados Unidos y Canadá, "aunque durante la pasada campaña, debido a los altos precios del pimiento en origen y al cambio del euro por el dólar, se han realizado pocos envíos".