Pulpo en conserva con el aroma de la cocina de mamá

Nada más acercarse a la puerta de sus instalaciones se percibe un aroma a comida casera que estimula el paladar del visitante, sea cual sea la hora de la visita. La familia Herrera ha sabido trasladar el pulpo en salsa de su madre al ámbito comercial, y desde el pasado mes de enero ha arrancado una aventura empresarial denominada Conservas La Receta, en alusión a esa alquimia de alimentos que se traducen en un excelente plato listo para comer.

De momento arrancan con una gama de productos reducida, que consta de tres tipos de conservas: pulpo, pulpo en salsa picante y majado de adobo. Todas ellas de quinta gama, basta con calentar el contenido del recipiente, y ya está listo para emplatar y degustar.

El secreto de su sabor está en los ingredientes y la preparación. "Todos son naturales. El pulpo es de caladeros almerienses, las almendras locales, y no lleva ni conservantes ni colorantes, solo especias naturales como la cúrcuma", explica uno de los socios fundadores, Manuel Herrera.

El pasado 11 de enero él y sus hermanos, Paco y Emilia, aparcaron parcialmente sus ocupaciones (director financiero de una empresa de distribución, comercial y monitora de Pilates y Fitness), y abrieron las puertas de su proyecto en común, una idea que surgió hace siete años por casualidad. "Fue en una cena", cuenta Manuel. "Cuando nos reuníamos con amigos hacíamos el pulpo en salsa y a todo el mundo le encantaba, y ese día uno me dijo que por qué no lo comercializábamos".

Hacer realidad ese sueño ha supuesto una inversión cuantiosa, 300.000 euros entre maquinaria y puesta a punto de las instalaciones. A lo largo de ese tiempo han tenido que contemplar numerosos aspectos. Para Paco Herrera, el aspecto que le parecía más complicado era lograr que el sabor fuera fiel a la receta de su madre. "Pensaba que iba a ser más difícil dar con la formulación correcta y la textura, no es lo mismo hacer cantidades pequeñas que a nivel industrial", recuerda. Sin embargo, estaba equivocado. "Nos sorprendió la facilidad con la que conseguimos darle el punto, y supimos que lo habíamos conseguido cuando lo probó nuestra madre y le gustó. Y eso que se resistía...".

De momento solo trabajan los tres hermanos, pero no descartan ampliar la plantilla si la producción lo requiere.

Su producción es semanal. Comienza en la lonja, donde compran la materia prima, el pulpo, y posteriormente lo cocinan en un proceso que dura entorno a 5 horas por 'marmita'.

"Cada semana hacemos entre 500 y 700 botes, es decir, unos 200 o 300 kilos", detalla Manuel. Cada unidad contiene 400 gramos de pulpo "que se queda en menos por la merma de la cocción, que ronda el 40%".

Su formato de venta es único, solo tienen recipientes de cristal de 250 gramos, "una ración".

La comercialización se centra en el canal Horeca (Hostelería, Restauración, Catering), y en comercios de tipo gourmet, principalmente.

A pesar de llevar poco tiempo en marcha, sus productos han tenido "muy buena acogida" y ya cuentan con más de 400 distribuidores y presencia en numerosos establecimientos de Almería (Mercado Central, Mercado de la Colonia de Belén, Kiosko Castillo de Tabernas en el Paseo, Cátame, La Divina Pastora...).

También han dado el salto internacional. El comercial de la empresa, Rafael Martínez, cuenta que "en Francia tenemos algunos clientes, y estamos trabajando con otros potenciales en Andorra, Ceuta, Melilla, Canarias y la zona norte de Marruecos". Recientemente les han pedido muestras de sus conservas en Rumanía.

La seguridad que tiene en este producto ha llevado a Martínez a promocionarlo en la cuna del marisco a nivel nacional, Galicia. "¿Por qué no van a comprar nuestras conservas? Está muy bueno y ellos son grandes consumidores de pulpo, además no tiene nada que ver con la receta a la gallega".

Para promocionar su firma y dar a conocer sus productos, estuvieron presentes en la pasada edición de Fitur, en el estand de Diputación Provincial de Almería, donde los visitaron directivos de Air Nostrum y diferentes empresarios y trabajadores presentes en la muestra.

Ahora toca seguir la buena senda iniciada. "La empresa es como un niño pequeño, hay que cuidar cada detalle para que siga creciendo". Sin duda, llegarán lejos.