La firma almeriense de montajes eléctricos celebró el pasado jueves la presentación de la instalación que acaba de finalizar en La Partala (Benahadux), con una gran presencia de público asistente y un nutrido grupo de representantes de las partes implicadas. En el acto, además, se quiso homenajear a los empleados de Sunkatel que han participado en el proyecto, el cual se ha podido realizar en un "tiempo récord" de cuatro meses gracias al "gran esfuerzo" de los mismos, como señaló el gerente de la empresa, Gonzalo Bascuñana. Durante su intervención en la ceremonia de apertura del acto, el gerente de la firma se declaró "orgulloso" de pertenecer a una empresa que puso "todos sus medios" para que la instalación concluyera con éxito y agradeció, asimismo, la estrecha colaboración entre todas las partes implicadas, especialmente a la promotora, Gestamp-Ensol. El director general de ésta, Benjamín Llaneza, dijo tener la "convicción de que hoy en día es difícil encontrar la seriedad del empresariado almeriense" y señaló su interés de repetir proyectos como éste en Almería "todas las veces que nos sea posible".

La planta solar fotovoltaica constituye un proyecto ambicioso. Promovida por la madrileña Gestamp-Ensol, se encuentra entre las 25 más grandes del mundo y es la segunda en dimensiones en la provincia, ocupando 40 hectáreas de terreno. Con una producción prevista de 16,4 megavatios anuales, dará un suministro equivalente al consumo de 8.150 viviendas, lo que supone un descenso de emisiones de dióxido de carbono de 16.400 toneladas, contribuyendo al cuidado del medio ambiente. Además, como destacó Francisco Mario Gómez, de TCI, no se trata de una huerta solar, ya que es "la primera de España en conectar en alta tensión". Para ello se requirió un procedimiento específico que posibilitó la instalación, dividiéndola en seis plantas, cinco de ellas con una potencia de 1.800 kilovatios y la última de 1.600.

Los datos corroboran la complejidad del proyecto. Para su instalación se utilizaron 18 centros de transformación, se realizaron 13 kilómetros de canalizaciones subterráneas, se requirieron más de 160 kilómetros de cableado y se removieron miles de kilómetros cúbicos de tierra en las más de 33 hectáreas de monte de la ubicación. Todo ello con el "máximo respeto" al entorno natural, ya que, como explicó el alcalde de Benahadux, el municipio "potencia el desarrollo sostenible", y hubo un seguimiento "muy estricto" por parte de los técnicos de medio ambiente. Asimismo, la delegada de Innovación, Sonia Rodríguez, subrayó el "momento clave" en el que se encuentra la provincia gracias al "interés" de empresas punteras por instalarse en Almería y al "cambio de mentalidad" sobre los nuevos recursos energéticos.